Victoria y José, padres del pequeño Julen, el niño fallecido en el pozo de Totalán, han decidido darse el sí quiero tras los malos momentos vividos en la finca malagueña.
La joven pareja ya había perdido con anterioridad otro hijo y justo en medio de la batalla judicial en la que se encuentran inmersos han optado por afianzar su vínculo y relación.
A pesar de la alegría del enlace, los contrayentes tiene aún un sabor amargo por la tragedia que les arrebató a su hijo. El matrimonio civil, que se ha celebrado este viernes 7 de febrero en los juzgados malagueños, ha estado plagado de detalles que rememoran a su hijo fallecido en el pozo de más de 100 metros de profundidad.
La ilusión de estos padres estará siempre empañada por no poder compartir los felices momentos con sus vástagos aunque luchen por seguir adelante con sus vidas.
