viernes. 29.03.2024

Los estudiantes universitarios de Estados Unidos todavía están pendientes de cómo serán las clases en el próximo curso. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump añadió otra preocupación más a los estudiantes exrtanjeros. En el caso de que las clases sean solo de manera online para prevenir contagios del coronavirus, los estudiantes internacionales tendrán que abandonar el país, ya que se les puede deportar a sus países de origen.

Así lo redacta las ordenanzas publicadas ayer por el departamento de Inmigración y Control de Aduanas estadounidense,  que anuncia un cambio legal “en un futuro cercano” para hacer efectiva la reforma de las normas, que cuando la pasada primavera las universidades cerraron sus puertas autorizaron a los estudiantes a seguir en el país, según informa La Vanguardia. 

Por otra parte, ya no se emitirán visados para aquellas personas que quieran acudir a estudiar a centros que ya hayan adelantado que solo impartirán clases online.

El anuncio, según La Vanguardia, que llega totalmente por sorpresa y deja a los afectados en un complicado limbo legal y personal, provocó reacciones de condena por parte de asociaciones de estudiantes, políticos y especialistas en Educación, que resaltan también el valor económico que los alumnos extranjeros tienen para EE.UU. Los estudiantes universitarios internacionales aportaron 45.000 millones de dólares a la economía estadounidense en el 2018, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio estadounidense. Sus matrículas, de hecho, sirven para financiar el coste de los estudios para los americanos.

“Esta decisión no tiene sentido, es xenófoba y cruel”, critica la senadora demócrata Elizabeth Warren. “La crueldad de esta Casa Blanca no conoce límites. Se está amenazando a los estudiantes extranjeros a elegir entre poner en riesgo sus vidas asistiendo a clases presenciales o ser deportados”, denunció su colega el senador Bernie Sanders. “La educación universitaria es un bien de exportación en EE.UU. Los estudiantes con visados no están quitando empleos a los estadounidenses, están comprando un producto estadounidense. Lo que está haciendo la Administración es hacer daño a las empresas americanas”, afirma el profesor Hans Noel, asociado a la universidad de Georgetown en Washington. Esta decisión “nos dice mucho de la versión del conservadurismo de Trump: no tiene que ver con el libre mercado, no es pro business. Es punitiva con una industria y un grupo, nos lo americanos, que a los trumpistas conservadores no les gusta”.

#NoSonBuenasNoticias Trump amenaza con echar del país a los extranjeros universitarios...