viernes. 19.04.2024

El Covid-19 sigue presentando incógnitas a los expertos médicos. El nuevo brote de Covid-19 registrado por hace dos semanas en el noroeste de China, que ha obligado de nuevo a establecer en esta zona medidas de confinamiento y limitación de la movilidad,  refleja que el virus tiene un mayor tiempo tiempo de incubación y de recuperación, presenta síntomas distintos y, además, afecta de manera distinta a los órganos de las personas. Ello ha sido constatado por médicos que trataron la pandemia en la ciudad de Wuhan

Ello ha sido explicitado por el intensivista Qiu Haibo, de la Comisión Nacional de Sanidad en una entrevista a la televisión estatal China, que se encuentra en Wuhan para tratar de frenar la expansión de la pandemia. 

Ha explicado que los pacientes tardan más de dos semanas en empezar a desarrollar síntomas, un periodo superior al establecido y corroborado en otros focos de contagio, lo que potencia el contagio del virus en el núcleo familiar principalmente. 

En cuanto a los síntomas, los pacientes desarrollan una fiebre de menor intensidad, dolores de gargantas fuertes así como malestar general. Además, los daños a los órganos se trasladan a el corazón, los riñones o el intestino, además de los pulmones, que son los que más daño sufren. Estos nuevos casos, apunta Qiu, se encuentran relacionados con casos importados desde Rusia.

A pesar de estos datos, aún no han sido revisados por investigadores independientes y, además, no se puede asimilar ello aún con una posible mutación del SARS-CoV-2. 

Estos nuevos datos y contagios muestran que aún queda mucho por estudiar acerca del virus y sus características para poder desarrollar una vacuna contra el mismo. 

Los nuevos focos de contagio de Covid-19 en China muestran la existencia de síntomas...