Desde Córdoba, los sanitarios han rendido un minuto de silencio a Nanda Casado Salinas, una enfermera que ha fallecido después de ayudar, junto al equipo sanitario, a todos los pacientes con coronavirus que llegaban al Centro de Salud Castilla del Pino. La enfermera de 62 años acabó contagiándose por formar parte de la población que se encontraba más expuesta al virus durante estos meses. Nanda, aparentemente, había superado la enfermedad y se había reincorporado al trabajo.
Sus compañeros sanitarios le han dedicado largos minutos de aplausos como símbolo de agradecimiento por todos los años que ha ejercido como enfermera en el Centro de Salud cordobés.
Dejaron además un mensaje escrito que decía: “Lo has dado todo por la enfermería. Ahora y siempre. Orgullo de profesional”.
