sábado. 20.04.2024

Eslovaquia lanza este sábado un programa para detectar el coronavirus entre toda la población mediante pruebas de antígenos, una primicia mundial que ha recibido críticas por estar, según algunos, mal preparada.

Unos 45.000 profesionales se ocuparán de realizar tests en este país recogiendo muestras en unos 5.000 puntos de detección.

"El mundo estará observando" de cerca, declaró el primer ministro Igor Matovic esta semana, y estimó que la medida salvará "cientos de vidas".

Estas pruebas proporcionan resultados rápidos, a veces en minutos, pero no se consideran tan fiables como las PCR, en las que las muestras nasales se envían a un laboratorio para ser analizadas.

La participación no es obligatoria pero una persona sin un certificado de test negativo se expone a una fuerte multa si la para la policía.

"Este será nuestro camino hacia la libertad", insistió Matovic, sugiriendo que entonces las restricciones impuestas por la pandemia podrían flexibilizarse una vez que se hayan terminado las pruebas o endurecerse si el programa no se lleva a cabo de forma total. 

Eslovaquia sería el primer país de este tamaño en organizar tests a escala nacional. Ya se han realizado pruebas generalizadas en ciudades chinas.

Estados europeos como Luxemburgo y Mónaco también han anunciado la adopción de esta medida. 

Como otros países, Eslovaquia ha experimentado un fuerte aumento de casos de coronavirus, que aún así es inferior a la media de la UE.

El viernes el país registró un nuevo récord de 3.363 infecciones diarias, lo que eleva el total a 55.091 casos. El número de muertos asciende a 212.

El gobierno prevé terminar las pruebas nacionales en dos días y realizar una segunda ronda el próximo fin de semana.

Pero le costó encontrar personal sanitario para hacer funcionar todos los puntos de detección y se vio obligado a ofrecer bonificaciones en efectivo a los médicos.

Durante las pruebas piloto en cuatro regiones de alto riesgo el fin de semana pasado, la gente tuvo que esperar hasta dos horas.

La Asociación Eslovaca de Médicos de Familia (SVLS) criticó el plan gubernamental. 

Según la asociación, "la concentración de millones de personas" en los sitios de detección "está en contradicción con las recomendaciones de los expertos en enfermedades infecciosas de reducir al máximo los contactos públicos y la movilidad".

Mucha gente, como Radovan Babincak, un desempleado que vive en la capital, Bratislava, quiere evitarlo.

"El gobierno y el primer ministro están amenazando a la gente", declaró a la AFP este hombre de 40 años.

Anton Dubovsky, empleado de una gasolinera de 67 años, también asegura que él y su hijo no se harán las pruebas.

"No estoy del todo convencido de que estas pruebas sean una buena idea", comenta.

Eslovaquia realiza este fin de semana test de Covid a la totalidad de sus 5.500.000...