De la misma manera que hizo en marzo y acertó, el neumólogo madrileño que predice en las redes como irá la pandemia del coronavirus advierte que las medidas suaves y poco restrictivas que se están imponiendo bajarán la incidencia del virus en diciembre y tendremos unas Navidades "casi normales" aunque, advierte que en esta ocasión no llegaremos a la incidencia "casi 0" de verano.
En el hilo publicado en twitter, el neumólogo hace uso de su "bola de cristal" para predecir la actuación e incidencia del virus en los próximos meses, de igual manera que hizo en marzo cuando nuestras vidas eran aún normales y previó que en los hospitales habrían unos 2.000 infectados en abril y que las camas de las UCI se saturarían, cosa que acertó de lleno.
Ahora se atreve a dar un pronóstico igual de preciso para los próximos meses invernales, donde prevé un efecto positivo en la incidencia del coronavirus en noviembre y diciembre, debido al cierre de la hostelería, los confinamientos suaves y otras medidas, como los test de antígenos en Madrid.
A lo largo de noviembre y principios de diciembre la incidencia va a bajar otra vez. Por el cierre de la hostelería, los confinamientos suaves, la limitación a los movimientos y el uso masivo de tests antigénicos como en Madrid. GOOD.
— Donni (@donni__69) November 8, 2020
El neumólogo advierte que la Navidad será "nuestro nuevo caldo de cultivo" pues al ser "casi normales" nos relajaremos haciendo que el seguimiento de las medidas de seguridad y las precauciones sean menores, de esta manera en enero y febrero dará comienzo una tercera ola de contagios que, según el tuitero, "será más rápida que la de verano, ya que partimos de una situación peor y el frío no nos va a ayudar".
Pero la Navidad va a ser de nuevo el caldo de cultivo ideal para que la incidencia vuelva a subir: desplazamientos, cenas de empresa, días de vacaciones, reuniones familiares... Y todo ello en interiores sin ventilar porque fuera en diciembre hace pelete 🥶. pic.twitter.com/72SlVf67ZN
— Donni (@donni__69) November 8, 2020
A esto además añade la alarma de enero, al ser el mes con mayor número de mortalidad y personas ingresadas en el hospital debido a enfermedades respiratorias, según aclara el tuitero, cosa que ayuda a la mortalidad del virus, pudiendo unirse la incidencia de la gripe que, "en invierno campa a sus anchas" y crear una gran cifra de fallecidos o pacientes graves, con unas camas de las UCI de nuevo abarrotadas de pacientes.