Un día miserable atascado en la nieve en la Interestatal 95 de los EE. UU. Mejoró debido a una especie de robo en la carretera.
El comprensivo CEO de una empresa de panadería ordenó a uno de sus conductores que pasara pan y panecillos a los autos varados, rompiendo algunos ayunos que iban a durar dos días.
Con algunos autos con bebés, mascotas y personas mayores, la falta de oportunidades para comer proporcionó tanta incomodidad como el frío a miles de automovilistas en la I-95 que quedaron varados cuando una tormenta invernal cayó alrededor de un pie de nieve en Virginia y otros. estados del este.
Una pareja de Maryland, Casey Holihan y su esposo John Noe, no habían comido durante 37 horas mientras esperaban que la nieve se despejara cuando vieron un camión de Schmidt Baking Company.
Sin pensar que funcionaría, la pareja hambrienta llamó a la línea de servicio al cliente de la empresa y preguntó si podían comer algo del pan.
"No pensamos que realmente funcionaría, pero menos de 20 minutos después recibimos una sorpresa increíble", escribió Casey en una publicación de Facebook. "Recibimos una llamada personal del propietario de la empresa, Chuck, quien se comunicó con el conductor".
“Fue una decisión fácil”, dijo Chuck Paterakis, director ejecutivo de H&S Baking, propietario de Schmidt. Sus palabras al conductor fueron "regala todo el pan" y agregó que estaba "muy humilde y agradecido de que pudiéramos ayudar".
El conductor Ron Hill abrió la parte trasera del camión y, con la ayuda de Casey y John, distribuyó 300 paquetes de pan y panecillos a más de 50 conductores varados.
“Seguimos dándolo hasta que no pudimos caminar más porque hacía mucho frío”, comentó Holihan. “Se sintió increíble solo escuchar a la gente decir gracias y escuchar a la gente tan aliviada de finalmente tener comida en su automóvil, comida en su sistema y en el sistema de sus hijos. Fue una sensación realmente increíble ".
