La Unidad de Cardiocirugía Infantil de La Salud ha a una niña de cuatro meses que sufría una cardiopatía congénita muy grave. La operación constaba de reconstruir el corazón de la pequeña, creando 2 aurículas, 2 ventrículos y 2 válvulas auriculoventriculares.
Según la información publicada en 20 minutos, los padres de la bebé, Sonsoles y Jaime, conocían gracias al diagnóstico prenatal durante el embarazo, que su hija iba a nacer con Trisomía 21 y con una cardiopatía congénita muy grave que afectaría gravemente a su vida después del nacimiento, pero decidieron seguir adelante.
Según el equipo de profesionales de La Salud, "presentaba todos los rasgos típicos de la cardiopatía congénita llamada Canal Auriculoventricular (AV) común completo que, si no se corregía, hubiera sido incompatible con la vida a los pocos meses".
La cirugía se realizó con circulación extracorpórea e hipotermia profunda a 25 grados y el corazón de la pequeña estuvo parado 45 minutos, durante los que el equipo de cirujanos lo reconstruyó completamente.
La bebé, que pesaba solamente 4,1 kilos a pesar de tener cuatro meses porque le costaba comer, ha evolucionado correctamente de la cirugía y las primeras doce horas requirió ventilación asistida, pero a las treinta y seis horas ya comenzó a alimentarse.
La pequeña está ya en su casa y, aparte de las revisiones periódicas, podrá llevar una vida normal, según un comunicado del centro hospitalario. La Unidad de Cardiocirugía Infantil de La Salud es la única privada existente en la Comunitat Valenciana y la segunda en España capaz de tratar y atender casos de alta complejidad como este.
La cardiopatía congénita es la malformación congénita aislada de mayor incidencia en España con 4.000 casos nuevos de niños cada año.
