El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha mostrado su pesimismo acerca del futuro de la pandemia protagonizada por la covid-19, al asegurar que no vislumbra un final de la misma a corto plazo y que los efectos que va a provocar sobre la población no desaparecerán en décadas.
Así manifestó su posición tras el inicio de la reunión del comité sobre el Reglamento Sanitario Internacional, cuyas conclusiones se publicaron el sábado en la la agencia sanitaria de la ONU.
El director de la OMS también ha mostrado su preocupación ante el resurgimiento de la enfermedad provocado nuevos brotes en países que parecía que lo peor ya había pasado, a pesar de que hace unas semanas estaban sufriendo menos problemas, ahora los nuevos positivos y los fallecimientos están incrementando.
Estas declaraciones han supuesto un baño de realidad para aquellos que piensan que esta pandemia desaparecerá en poco tiempo. Ello no solo es una opinión del doctor y director del organismo sanitario internacional, sino que los datos globales son preocupantes. El sábado 1 de agosto, último día de actualización de los datos de la covid-19, en el mundo hay un total de 17.600.740 personas contagiadas y el número de fallecidos llega hasta los 679.600, un incremento importante en ambas casillas, ya que el viernes los datos reflejaban 17,3 millones de positivos y 673.000 decesos. A la cabeza de estos datos se encuentra Estados Unidos, que ha registrado hasta el momento 4.562.171 casos y 153.314 muertos.
Por ello, el comité ha recomendado a la OMS que siga movilizando a entidades de todos los estados para poder una respuesta contundente al coronavirus.
