miércoles. 24.04.2024

Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) describen el nuevo potencial mecanismo patogénico en el desarrollo de miocardiopatía hipertrófica. Considerada como un de las enfermedades más comunes del corazón, genéticamente. El estudio, publicado en la revista 'ACS Nano' describe las alteraciones mecánicas de uno de los componentes que deviene para el desarrollo de esta enfermedad. 

El músculo cardiaco se encuentra sometido a continuo estrés mecánico durante toda la vida humana, ejerciendo un movimiento de contracción para bombear sangre por el organismo. El laboratorio dirigido por el doctor Jorge Alegre-Cebollada investiga cómo las propiedades mecánicas de las proteínas cardiacas determinan el comportamiento fisiológico de este músculo y cómo su alteración condiciona la aparición de trastornos como la MCH. 

Esta enfermedad, "en la que el ventrículo izquierdo se engrosa anormalmente", señala el doctor Alegre-Cebollada es la más común entre las dolencias hereditarias que afectan al músculo cardiaco y sus manifestaciones más graves incluyen la muerte súbita y la insuficiencia cardiaca. Desde hace más de 20 años se sabe que diferentes mutaciones en proteínas con función mecánica en los miocardiocitos causan miocardiopatía hipertrófica.

Uno de los objetivos de la medicina cardiovascular es conocer e identificar cuáles son las variantes genéticas que se encuentran en pacientes y familias para describir las patogénicas. Saber si una mutación es patogénica o no es importante porque define el tipo de seguimiento clínico de los miembros de una familia y, potencialmente, su tratamiento.

En el estudio se ha analizado la proteína c de unión a miosina (cMyBP-C). Según explica la primera autora del artículo, Carmen Suay-Corredera, la proteína cMyBP-C, con función mecánica en la regulación de la contracción cardiaca, es la proteína más frecuentemente mutada en pacientes con MCH y uno de los focos de estudio del grupo de Alegre-Cebollada. "Una proporción significativa de mutaciones en cMyBP-C causa cambios de aminoácido en la proteína; sin embargo, los mecanismos patogénicos por los que provocan MCH siguen sin conocerse con precisión", añade.

En el estudio se ha analizado la proteína c de unión a miosina (cMyBP-C). Según explica la primera autora del artículo, Carmen Suay-Corredera, la proteína cMyBP-C, con función mecánica en la regulación de la contracción cardiaca, es la proteína más frecuentemente mutada en pacientes con MCH y uno de los focos de estudio del grupo de Alegre-Cebollada. "Una proporción significativa de mutaciones en cMyBP-C causa cambios de aminoácido en la proteína; sin embargo, los mecanismos patogénicos por los que provocan MCH siguen sin conocerse con precisión", añade. 

"Y son precisamente estas variantes con mecanismo patogénico desconocido las que se ha analizado en este artículo", señala el doctor Alegre-Cebollada, que dirige el Grupo de Mecánica Molecular del Sistema Cardiovascular en el CNIC. Actualmente, "estamos buscando mecanismos patogénicos para aquellas variantes en las que todavía no se ha detectado ninguna alteración relevante en los estudios anteriores", afirma Alegre-Cebollada. Para ello, trabajan con distintos modelos experimentales, desde sistemas moleculares hasta modelos animales de la enfermedad.

La descripción de mecanismos moleculares en MCH es clave para la identificación de mutaciones patogénicas en cMyBP-C, y, por tanto, para el seguimiento clínico y potencial tratamiento de los pacientes y sus familias, concluyen los investigadores.

 

Investigadores del CNIC detallan un nuevo mecanismo en el desarrollo de miocardiopatía...