viernes. 29.03.2024

Las biotintas son un líquido que contiene células vivas, un material estructural y factores de crecimiento. Éstas permiten que las células se reproduzcan, transformando el material en tejido biológico puro.

Las tintas biológicas se extruyen de la boquilla de una impresora 3D, acumulando partes del cuerpo capa por capa. En muchos casos, son curadas en un material sólido mediante la exposición a la luz ultravioleta. Desafortunadamente, los rayos UV son perjudiciales para el tejido del paciente si se administran dentro del cuerpo, por lo que (hasta le momento) el proceso se desarrolla en el exterior.

Un poderoso descubrimiento podría transformar esta realidad, planteando un avance. La nueva biotinta acuñada mediante una colaboración entre científicos del Instituto Teraski, la Universidad Estatal de Ohio y la Universidad Estatal de Pensilvania.

El citado líquido se dispensa desde la punta de una boquilla controlada por un robot, e insertada de forma quirúrgica en el organismo del paciente, efectuando el proceso a través de una pequeña incisión.

Con la finalidad de mantener todos los filamentos de la bio-tinta en su lugar, la boquilla perfora un pequeño vacío en el tejido interno blando del paciente, depositando una gota de líquido de anclaje en el interior de ese espacio. Cuando la boquilla es retirada, coloca otra gota en el exterior del tejido, que sirve como un ancla adicional. El resto del filamento se arrastra a otro punto de anclaje.

Esta nueva biotinta podría aplicarse de forma interna a la temperatura corporal normal y curarse en un sólido utilizando una fuente de luz visible no UV.

En el futuro la sustancia podría usarse para construir partes como vasos sanguíneos o discos espinales.  


 

Fabrican una biotinta que permite imprimir piezas 3D dentro del cuerpo humano