viernes. 19.04.2024

Los científicos de diferentes universidades, como China y Suiza, administraron testosterona a parte de los hombres involucrados en el estudio, mientras que al resto, les suministraron una sustancia placebo. Dicho estudio, se publicó en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, el cual determinó que cuanto mayor es el nivel de testosterona en un hombre, mayor es su egoísmo económico. 

La muestra del estudio contaba con 70 varones jóvenes y sanos de entre 18 y 25 años. Los voluntarios recibieron, tras la inyección de testosterona, una cantidad de dinero para elegir qué hacer con él: quedarse con todo el dinero y compartirlo con otros individuos.

La práctica de los diferentes varones demostró que los que habían recibido el placebo eran más cercanos a la solidaridad, en cambio, los que habían recibido la testosterona tuvieron un comportamiento más egoísta eligiendo quedarse con todo el dinero. 

Los científicos revelaron tras el estudio que la testosterona disminuía la acción del cerebro vinculada a la empatía, esta parte se denomina unión temporoparietal. 

La hormona sexual masculina también la producen las mujeres, pero, en menores cantidades. Además, tiene una función primordial en la evolución del cuerpo humano y de muchos vertebrados.

Según los expertos, la generosidad de un hombre depende de sus niveles de testosterona