jueves. 18.04.2024

Dejar de fumar puede prolongar la vida incluso con cáncer de pulmón. Así lo ha revelado un estudio de la revista médica “Annals of Internal Medicine”, abandonar el tabaco tras ser diagnosticado de cáncer de pulmón con células no pequeñas en una fase temprana puede disminuir la mortalidad y retrasar la progresión de la enfermedad. 

El cáncer de pulmón es una de las principales causas de muerte entre la población y cerca del 50% de los pacientes continúan fumando tras el diagnóstico.

Los investigadores siguieron el caso de 517 pacientes en una fase temprana de la enfermedad. A cada paciente se le asignó de media unos siete años para ver cómo evolucionaba la enfermedad, el tabaquismo y los tratamientos. 

Menos de la mitad decidió abandonar su consumo de tabaco, tuvieron una mayor esperanza de vida, 6,6 años contra los 4,8 de las personas que no dejaron de fumar. Por otra parte, también tiene un tiempo más prolongado hasta la muerte por cáncer de pulmón, 7,9 años frente a 6. 

Según los investigadores, la conclusión es que dejar de fumar después del diagnóstico incrementa la supervivencia y la posibilidad de vivir sin cáncer entre los fumadores habituales en los que se detecta la enfermedad en una fase temprana.

Dejar de fumar puede prolongar la vida, sufra o no cáncer de pulmón