Se ha registrado el primer caso de Covid en una persona contagiada, no por otra persona, si no por un gato. Ha sido un equipo de investigadores de Tailandia ha informado sobre la primera evidencia sólida de un gato transmitiendo el Covid a un humano, según ha informado el medio Nature.
Hasta día de hoy, la posibilidad de contagio de un felino de compañía a un humano era una posibilidad que no se concebía, a pesar de que sí se sabía que estos animales podían contraer Covid. Para más inri, estos animales no estaban incluidos en la lista de animales con capacidad de transmitir el Covid.
A pesar de lo que se pensaba, los resultados de la investigación son contundentes y sorprendentes por el hecho de que una transmisión de gato a un humano, haya tardado tanto en suceder, teniendo en cuenta su habitual presencia en los hogares. “Sabíamos que esta era una posibilidad desde hace dos años”, dice Angela Bosco-Lauth, investigadora de enfermedades infecciosas en la Universidad Estatal de Colorado en Fort Collins, en declaraciones a la revista 'Nature'.
En los primeros estudios sobre el Coronavirus se descubrió que los gatos arrojaban partículas de virus infecciosos que podían infectar a otros gatos, además, a lo largo de la pandemia, se notificaron numerosos casos de gatos siendo contagiados, por lo que había evidencias de que dichos animales de compañía podían contraer el virus, pero no transmitirlo a humanos.
El primer caso en concreto fue de la transmisión de un gato a su veterinario. Después de que el dueño e hijo de este transmitieran el Covid a su gato, el cual también dio positivo y estornudo en la cara del veterinario, cuando este estaba tomando su muestra. A pesar de este llevar mascarilla y guantes, no llevaba protector en los ojos.
Tres días después, el veterinario empezó a experimentar síntomas propios del Covid, como fiebre y tos. El veterinario no había tenido ningún contacto con ningún otro positivo, solo con aquel gato. El análisis genético que se realizó después fue la pintilla, pues el veterinario estaba infectado con la misma variante que el gato y sus dueños, sus secuencias genómicas virales eran idénticas.
