jueves. 28.03.2024

La Fuente del Elefante es uno de los lugares más emblemáticos del entorno de Santa María de Trassierra donde confluyen intereses arqueológicos, sociales (es un lugar muy visitado por los ciudadanos de Córdoba), ecológicos y científicos. En la actualidad está en un estado lamentable debido a la entrada de ganado porcino en ella.

Aspecto de la Fuente del Elefante en mayo del 2010 tras excluir el ganado mediante un vallado de madera. SOCOHINA

Esta alberca construida en época califal ha mantenido agua y unas condiciones idóneas para el asentamiento de poblaciones de anfibios de gran interés como es el tritón jaspeado pigmeo (Triturus pygmaeus), un endemismo del sur peninsular considerado como una especie vulnerable a la extinción según los criterios de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Hay registros sistemáticos de la presencia de esta especie en este lugar desde la década de los años ochenta.

Sin embargo, a partir de la mitad de la década de los noventa la entrada de ganado vacuno provocó el deterioro de la calidad del agua y la disminución del hidroperiodo por lo que, cuando los tritones conseguían reproducirse, las larvas no podían completar la metamorfosis. Así comenzó un paulatino declive de la población en los primeros años del siglo actual hasta hacerla casi desaparecer. Conviene recordar que los anfibios, actualmente, son los vertebrados más amenazados del planeta (algo más del 41 % de las especies del mundo podrían extinguirse en las próximas décadas).

Por este motivo, en 2009 con fondos europeos, la Junta de Andalucía incluyó esta zona en un proyecto de conservación de anfibios a nivel andaluz mediante un convenio con la propiedad. El objetivo fue recuperar las poblaciones de tritón en la Fuente del Elefante, crear nuevas charcas en las que se estableciesen nuevas poblaciones y restablecer la conexión perdida con las poblaciones de la zona del arroyo Bejarano, situado a unos 1800 m. al norte en línea recta. Este proyecto pretendía reforzar los logros conseguidos en el entorno del arroyo Bejarano unos años antes gracias al proyecto de medidas compensatorias por la ampliación del embalse de la Breña.

Ambos proyectos simultáneamente tenían el objetivo de consolidar un sistema de

metapoblaciones para asegurar la conservación del tritón en esa importante zona a medio y largo plazo. En la Fuente del Elefante se hizo una limpieza superficial para no afectar a la propia alberca y se restituyó el canal que hay junto a ella para subir el nivel de agua y conseguir que la alberca tuviese un mayor hidroperiodo. También se cerró todo el perímetro para impedir la entrada de ganado y se colocaron paneles informativos para que los visitantes pudiesen conocer la importancia ecológica del lugar. Además, se restauró un manantial cercano y se construyeron tres charcas con distintos tamaños y profundidades en un llano encharcadizo cercano con un cerramiento perimetral que las protegía.

El mismo año en el que se realizaron estas medidas las charcas fueron colonizadas por plantas e invertebrados acuáticos y algunas especies de anfibios como la ranita meridional (Hyla meridionalis) o la rana común (Pelophylax perezi) comenzaron a reproducirse en ellas. Al año siguiente especies como la salamandra común (Salamandra salamandra) y el tritón se reprodujeron con éxito y las larvas lograron pasar la metamorfosis.

Dos años después la población de tritón tenía un número importante de efectivos y todo apuntaba a una recuperación a un ritmo muy positivo. Sin embargo, en 2012 la Junta de Andalucía dio por finalizado el proyecto y con él el convenio con la propiedad. Esto hizo que se eliminasen cercados de las charcas nuevas y la entrada masiva de ganado provocó

su destrucción. Con el tiempo, el deterioro paulatino del vallado de la Fuente del Elefante, sin nadie que lo arreglase, ha permitido la entrada de ganado porcino en la alberca destruyendo este delicado hábitat y transformándolo en una ciénaga llena de orines y excrementos.

#NoSonBuenasNoticias: El abandono de la Fuente del Elefante en Trassierra la convierte...