El Ayuntamiento de Belalcázar y la empresa Salsum TUR han presentado hoy, junto con los promotores del proyecto, la 'Asociación Cultural Turdulia Belalcazarensis' y la 'Asociación de Amigos de Belalcázar, Villa de Monumentos', la Carta Arqueológica de Riesgo de la localidad. Un trabajo en el que se han invertido dos años de intenso trabajo para catalogar e inventariar el rico patrimonio histórico y arqueológico de Belalcázar.
ACTO DE ENTREGA DE LA CARTA ARQUEOLÓGICA DE RIESGO DE BELALCÁZAR
En el acto de entrega que ha tenido lugar esta mañana en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Belalcázar, han estado presentes el alcalde de la localidad, D. Francisco Luis Fernández Rodríguez, los arqueólogos responsables de la elaboración de la Carta Arqueológica, D. Manuel Cobo Aguilera y D. Antonio Criado Algaba, y varios representantes de las asociaciones culturales que han actuado como promotores e impulsores del proyecto. Durante la presentación, se ha destacado la importancia que un estudio como este tiene sobre la localidad y la relevancia del mismo para la protección del patrimonio local.
La Carta Arqueológica de Riesgo de Belalcázar se concibe como una serie de documentos de carácter informativo, analítico y de propuesta que, imbricados en las figuras de planeamiento previstas en la normativa vigente (Plan Básico de Ordenación Municipal y Planes Especiales de Protección), tienen como objetivo primordial el conocimiento y protección del Patrimonio Arqueológico e Histórico de la población, convirtiéndose en un instrumento fundamental para su tutela y gestión por parte de las Administraciones Públicas.
Gracias a las labores realizadas durante estos meses, se han documentado en Belalcázar más de 260 enclaves patrimoniales y arqueológicos de especial interés, que serán recogidos en el PBOM del municipio para garantizar su protección y aprovechar la potencialidad turística de algunos de ellos, los cuales podrán ser objeto de futuras excavaciones a través de la firma de nuevos convenios de colaboración. No obstante, se ha matizado que se trata de un documento vivo y abierto, ya que el patrimonio es cambiante y siempre pueden aflorar nuevos yacimientos o elementos arquitectónicos reseñables, cuya incorporación sea necesaria.
IMPORTANCIA PARA LA LOCALIDAD
Se trata, pues, de un elemento imprescindible para el conocimiento por parte de la población de su propio patrimonio y del grado de preservación del mismo, que sirve como herramienta eficaz para localizar y proteger la riqueza arqueológica y patrimonial de Belalcázar, que tiene su mayor exponente en la época prehistórica, donde atesora sus hallazgos más destacables y la diferencia de otras regiones de la provincia donde la romanización borró un mayor rastro de civilizaciones previas.
En esta línea, la Asociación Cultural Turdulia, promotora del proyecto, ha manifestado que, con la entrega al Ayuntamiento de esta Carta Arqueológica, además de asegurar la protección de estos elementos patrimoniales y arqueológicos que conforman el patrimonio arquitectónico y cultural de Belalcázar, identificado como el "objetivo primordial y más urgente", pretenden que la misma se convierta en un "elemento catalizador de futuras acciones de investigación y puesta en valor del patrimonio local que incentiven el desarrollo económico de la región, ensalzando el potencial turístico que sus elementos más significativos puedan comportar".
Esta propuesta era uno de los proyectos fundacionales de dicha asociación, que ve así cumplida una de sus reivindicaciones históricas más importantes, declarándose orgullosos por haber logrado por fin alcanzar este hito, pero reclamando igualmente la finalización de las obras en el edificio que albergará la Colección Museográfica de Belalcázar, pendiente todavía de inauguración, donde está previsto que se recojan y protejan todos los bienes con elevado riesgo de expolio que existen en la actualidad en el término municipal, para dar completitud al proyecto y ejercer como nuevo punto de interés turístico dentro del casco urbano para el visitante.
Y aunque la entrega de la Carta se haya producido con cierto retraso sobre lo previsto debido a lo basto del proyecto y a las dificultades encontradas durante los primeros meses de su ejecución por las restricciones existentes por la pandemia, desde la Asociación Cultural Turdulia consideran que "se trata este de un avance de incalculable valor para establecer la correcta tutela del Patrimonio Arqueológico de nuestro municipio y de una oportunidad para convertirlo en un recurso para el desarrollo económico y turístico de la población".
ORIGEN DE LA INICIATIVA
Este trabajo de documentación y catalogación del Patrimonio Arqueológico de Belalcázar se inició en diciembre de 2020 con la autorización por parte de la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía del proyecto y la posterior firma de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Belalcázar y la empresa Salsum TUR, que se ha encargado de la realización del proyecto bajo la dirección facultativa del arqueólogo D. Manuel Cobo Aguilera, profesional con acreditada experiencia para acometer la dirección de la intervención propuesta.
La iniciativa surgió de las dos principales asociaciones culturales de la localidad, la 'Asociación Cultural Turdulia Belalcazarensis' y la 'Asociación Amigos de Belalcázar, Villa de Monumentos', que actuaron como promotores privados de este proyecto ante lo que consideraron "la apremiante necesidad de establecer una correcta tutela del patrimonio arqueológico de nuestro municipio ante el incesante expolio y destrucción detectado en las últimas décadas, que está comportando la pérdida irreversible de gran parte de nuestra historia". La acción a emprender pasaba, inevitablemente, por adquirir un conocimiento global del patrimonio existente en el conjunto del término municipal, con motivo de acometer una sistematización conjunta del mismo relacionándolo con los factores objeto de la Carta Arqueológica de Riesgo: identificar, evaluar, diagnosticar y normalizar, con la intención de incardinar, la protección y conservación de dicho patrimonio con el planeamiento territorial y urbanístico.