El cineasta José Luis Cuerda, director, productor y guionista de cine, ha fallecido este martes a los 72 años tras sufrir una embolia en el Hospital de la Princesa de Madrid, según han informado fuentes familiares.
Irene y Elena Cuerda, hijas del cineasta, han expresado su pesar en un comunicado y han agradecido las muestras de cariño hacia el que ha sido uno de los directores más importantes del cine español de las últimas décadas.
Cuerda había acudido a una cita médica rutinaria y se encontraba ya en el centro hospitalario cuando sufrió la embolia.
La capilla ardiente se instalará mañana, a las 11:00, en el Tanatorio de la Paz.
El director de Amanece, que no es poco (1989), película de culto que ha pasado a la historia del cine español, rodó su última cinta, Tiempo después, en 2018.
El cineasta, ganador de cuatro Premios Goya (dos de ellos como productor), ha fallecido después de una larga enfermedad que se acentuó al terminar esa última película, a la que dedicó los últimos años de su vida y que pudo rodar gracias al apoyo de un grupo de cómicos devotos de su cine, encabezados por Arturo Valls que ejerció de productor.
Cuerda (Albacete, 1947) es famoso por su trilogía denominada del “surruralismo”, compuesta por Total, Amanece, que no es poco y Así en el cielo como en la tierra, que él calificaba como “un retorcimiento de la realidad que sigue siendo realidad”.
También son famosas sus exitosas adaptaciones de El bosque animado, de Wenceslao Fernández Flórez, La lengua de las mariposas (1999), de Manuel Rivas, y Los girasoles ciegos (2008), de Alberto Méndez.
Y produjo las primeras películas de Alejandro Amenábar, Tesis (1996) y Abre los ojos (1997).
Lo curioso es que su primera vocación fue la de ser sacerdote, pero después de tres años abandonó el seminario para estudiar Derecho, que tampoco terminaría. Al final acabó convirtiéndose en técnico de radiodifusión, colaborando en informativos y llegando a dirigir programas culturales en TVE (1968-1972).
Fue esta casa la que le financiaría dos telefilmes, que supusieron sus primeros trabajos como realizador, El túnel, una interesante adaptación de la célebre novela de Ernesto Sábato, y Mala racha, protagonizada por Sancho Gracia en la piel de un boxeador.
Pero su primer título destacado fue la película Total (1983), con la que Cuerda comenzó su trilogía de "surruralismo", y que es una versión surrealista de algunos de los pasajes de la Biblia. Un trabajo gracias al que obtuvo el Premio de la Crítica del Festival de Montecarlo.
Su primer largometraje fue Pares y nones (1982), con guion propio y protagonizada por Antonio Resines, uno de sus actores fetiche, al que siguió Mala racha (1985), reconocido en 1986 con el primer premio del Festival de Banff (Canadá).
El bosque animado (1987) fue la película que le otorgó prestigio dentro y fuera de España. Basado en la novela de Wenceslao Fernández Flórez, el filme se hizo con cinco Premios Goya en 1988, entre ellos, los de mejor película, mejor actor protagonista (Alfredo Landa) y el mejor guion.
En 1989 estrenó su tercera película en pantalla grande, Amanece, que no es poco, la película que más fama le dio, llena de un humor tan absurdo como inteligente, con un reparto coral en el que todos brillaron a gran altura, como José Sazatornil, Manuel Alexandre, Rafael Alonso o Antonio Resines.
Otros de sus títulos más conocidos son La viuda del capitán Estrada (1991), con Anna Galiena, Sergi Mateu y Nacho Martínez, La marrana, con la que Alfredo Landa recibió el Goya al mejor actor en 1993, y en la que volvía aparecer Antonio Resines, uno de los nombres más habituales de su filmografía
Le siguieron Tocando fondo (1993) y Así en el cielo como en la tierra (1995), segunda parte de la trilogía que comenzó con Amanece, que no es poco y que finalizó en 2018 con la que sería su última película, Tiempo después.
Regresaría a TVE, en 1997, para rodar la serie televisiva Makinavaja, adaptación de las peripecias del personaje de Ivá protagonizada por Pepe Rubianes, con irregulares resultados.
En 1999 llegó otro de sus títulos emblemáticos, La lengua de las mariposas, la adaptación de dos preciosos relatos del escritor y periodista Manuel Rivas, que Cuerda trasladó con brillantez a la gran pantalla. Y con un enorme Fenando Fernán Gómez. La película recibió el Goya al mejor guion adaptado para Rafael Azcona, que supo a poco para las 13 candidaturas que había obtenido.
Cuerda dirigió después La educación de las hadas (2006) y Los girasoles ciegos (2008), adaptación de la novela de Alberto Méndez con Javier Cámara, Maribel Verdú y Raúl Arévalo. Volvió a arrasar en las nominaciones a los Goya, con 15 candidaturas, pero de nuevo ganó solo un premio, el de guion, para Cuerda y Azcona. La película fue elegida en 2009 para representar a España en los Oscar en la categoría de mejor película en lengua no inglesa.
Sus últimas películas fueron Todos es silencio (2012), rodada en tierras gallegas, y Tiempo después (2018), una adaptación de su novela homónima, con la que cerraba su trilogía surrealista.
Como escritor Cuerda publicó guiones como el de Amanece, que no es poco y libros como Si amaestras una cabra llevas mucho adelantado. Hace apenas unos meses se publicó su último libro, Memorias fritas, unas memorias en las que hacía un repaso de muchas de las facetas de su vida, como siempre con mucho humor.
Las memorias de Cuerda fueron publicadas el pasado mes de octubre por la editorial Pepitas de Calabaza, un nombre que, precisamente, sale de una cita de la película de Cuerda Amanece que no es poco: "Calabaza, yo te llevo en el corazón".
En su dilatada carrera cinematográfica fue premiado con numerosas distinciones. Además de los cinco Goyas mencionados, poseía la Medalla de Oro de las Bellas Artes (2002), la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha y en 2019 fue Premio de Honor de los Premios Feroz.
Dueño de un afilado, disparatado y muy personal sentido del humor, en una de sus últimas entrevistas renegaba de la etiqueta del "surrealismo" porque el surrealismo "es lo automático, lo sin cálculo ni medida, y eso en cine no puede ser".