jueves. 28.03.2024

Emrie es una niña de 7 años de la ciudad de Kansas, en el estado estadounidense de Misuri. La joven nació con una anomalía genética que le impide ver, pero no por ello ha dado de lado su mayor afición: la lectura.

Desde los cuatro años, cuando aprendió a leer braille, se declaró fan de la saga de libros escrita por J. K. Rowling, Harry Potter. Sin embargo, aunque destaca grandes momentos junto a su padre, mientras él le leía los cuentos en voz alta, Emrie ha decidido seguir leyéndolos por su cuenta.

Para ello, su tía Kateyn Suter decidió regalarle a la joven la oportunidad de seguir con su afición con los libros de Harry Potter escritos en braille. Sin embargo, debido a que cada uno de los siete volúmenes de los que consta la colección cuesta 200 euros, mucha gente se prestó a colaborar con la causa, a través de la plataforma GoFundMe.

En un solo día, la familia obtuvo unos 3440 euros, lo que superó muy por encima el objetivo marcado para comprar los libros. Es por ello que la familia de Emrie decidió adquirir con el dinero sobrante otras cinco sagas más, las cuales donarían a bibliotecas y escuelas para que personas con el mismo problema que Emrie puedan acceder a los libros.

"Me quedo sin palabras ante la amabilidad que hemos recibido en las últimas 24 horas y no puedo dar las gracias lo suficiente a todos y cada uno de vosotros por contribuir", ha escrito la familia a modo de agradecimiento en el portal GoFundMe a todas aquellas personas que han hecho posible cumplir el sueño de la joven Emrie.

Una niña ciega se emociona al recibir unos libros de Harry Potter escritos en braille