viernes. 19.04.2024

Carly Boyd necesitaba contarle algo a su abuelo, quien se encontraba en un hogar de ancianos con las visitas restringidas por el coronavirus. Recientemente su novio le había pedido matrimonio y no podía esperar al fin del confinamiento para ir y mostrarle su anillo.

Por lo que finalmente decidió ir hasta la residencia y contarle a su abuelo la noticia a través del cristal de la ventana.

Boyd levantó la mano derecha hacia la ventana de su abuelo en el Centro de Rehabilitación y Vida Premier en Lake Waccamaw, Carolina del Norte, y le enseñó el anillo. Su abuelo colocó la mano derecha en la ventana mientras ella contenía las lágrimas.

Gennie Parnell, una administradora del hogar de ancianos, ayudó a facilitar el dulce momento.

"Ella estaba allí con su mano enseñándole la sortija", dijo Parnell a NBC News. "El abuelo permanecía acostado allí comiendo un helado. Es el caballero más dulce.

"Se levantó para verlo mejor y ella puso su mano sobre la ventana y él puso su mano sobre la ventana, y todos nos derrumbamos".

Las fotos del momento publicadas por el hogar de ancianos se han vuelto virales en Facebook a medida que los estadounidenses se adaptan a la realidad de las numerosas restricciones impuestas a la vida diaria para ayudar a detener la propagación del coronavirus. Premier Living and Rehab Center ha detenido todas las visitas según las recomendaciones de los principales funcionarios de salud pública.

"¡Estoy tan contenta de que me posibilitaran ver a mi abuelo, incluso bajo las circunstancias de este virus, pude decirle que estoy comprometida!" Boyd escribió en Facebook. "¡Gracias personal de primera!"

El especial momento en el que una nieta le cuenta a su abuelo que se ha comprometido...