28 de julio de 2019, 12:57
Empezó como actor a finales de la década de los 90, cuando acompañó a un amigo a la grabación de la serie ¡Ay, Señor, Señor!, en la que hizo una pequeña intervención que supuso el principio de su trayectoria. Anteriormente había realizado trabajos como figurante, y había trabajado en diversos empleos, como vendedor de enciclopedias a domicilio, camarero, dependiente de grandes almacenes o albañil.
«Se nos ha ido este ser maravilloso, metrosexual, pensador y mente fría. Buen viaje, Edu, y gracias por tantos años de risas y de buen rollo. Eres historia de la comedia. Adiós, león», ha escrito el creador de las series, Alberto Caballero en su cuenta de Twitter.