En una farmacia situada en el centro de Vigo no salen de su asombro por todo lo que vivieron este domingo. Por un momento, todo apuntaba a ser un atraco como cualquier otro, pero que tuvo un desenlace bastante inesperado, con un giro de guion digno de película.
El individuo entró alrededor de las 3 de la tarde y, simulando que llevaba un arma en el bolsillo, atracó a los trabajadores llevándose 250 euros de botín. Tras ocurrir, los farmacéuticos dieron la voz de alarma a la policía. Fue cuando llegaron las autoridades cuando los agentes investigaban el suceso en la farmacia. El teléfono fijo recibió una llamada del propio ladrón, el cual quería pedir perdón por lo que había hecho.
Fue en ese momento cuando un agente se puso al teléfono y entabló conversación con el caco para intentar convencerle de que le dijera donde se encontraba y así poder recuperar el dinero. El ladrón acabó confesando que se situaba en la zona de Churruca, uno de los barrios de olívica en Vigo. Varios efectivos se movilizaron al lugar, pero no lograron encontrarlo.
Ahora la investigación continúa con el visionado de las cámaras de seguridad y por el momento el atracador no ha podido ser identificado.
