La irresponsabilidad de algunas personas llega a límites insospechados a veces. Una de esas personas irresponsables de las que hablamos es una mujer de 53 años que estaba haciendo el Camino de Santiago. Recordemos que esa ruta de peregrinos y peregrinas es universal y, como en todos los ámbitos, también está sufriendo los efectos negativos de la pandemia mundial por COVID-19 que vivimos. No obstante, muchas personas quieren realizar este popular camino y aprovechan que es verano para llevar a cabo su deseo.
La mujer, madrileña de origen, inició la ruta hace tan solo unos cuantos días y formaba parte de un grupo de peregrinos de aproximadamente 20 personas. Según informó el Diario de Pontevedra, uno de los días en los que ya realizaba el camino empezó a encontrarse mal, incluso llegando a tener tos y fiebre, dos de los síntomas compatibles con la COVID-19.
La mujer fue a un centro de salud donde explicó los síntomas que tenía y le hicieron la prueba PCR para confirmar si estaba o no contagiada con la COVID-19. El resultado de la prueba confirmó lo que se sospecha, ya que dio positivo, pero la mujer decidió seguir con el camino, no hizo caso a las advertencias del personal sanitario y se saltó el aislamiento obligatorio en el que debía estar.
Cuando se comunicó el resultado que había dado la mujer, ella estaba en Arzúa, un municipio de la provincia de La Coruña, y es allí donde ahora tiene que quedarse para la cuarentena. A las demás personas del grupo en el que iba se les están realizando las pruebas PCR para confirmar o descartar el contagio por COVID-19 porque de confirmarse deben ponerse en aislamiento también.
