sábado. 20.04.2024

El Pequeño Nicolás estaba a la espera de que se produjera la Audiencia Provincial para dictaminar si era condenado o no a un año y nueve meses de prisión tras el juicio que le acusaba de falsificar un DNI para ser suplantado en las pruebas de selectividad. A tan los 24 horas del juicio, Francisco Nicolás decidió cenar en uno de los restaurantes de moda de Madrid, ubicado en la calle Velázquez con sus amigos.

La incertidumbre tenía intranquilo a Francisco, no solo se enfrentaba a ese proceso, sino que en ocasiones anteriores ya se había sentado en el banquillo acusado de suplantar a un supuesto enlace de Casa Real en una presunta visita del rey emérito a Ribadeo en el que se enfrenta a siete años de prisión. Por esta razón, amabas condenas podría hacerle entrar en la cárcel.

Mientras cenaban en dicho restaurante, apareció por allí Eladio Rubén López, polémico inspector que durante su etapa en Asuntos Internos se encargó de investigar a Francisco Nicolás y que ahora ocupa un cargo de confianza como asesor de seguridad en el ministerio de Transportes. El Pequeño Nicolás no dudo en levantarse y dirigirse directamente al funcionario y le dijo públicamente: “me habéis arruinado la vida”, tratando de arrancar una conversación que no se prolongó mucho más.

Francisco sabe lo que le puede esperar dentro de 24 horas. La Fiscalía le acusa de montar una presunta estafa a un empresario sobre una finca en Toledo, para la que aseguró al propietario que conseguiría un crédito en Guinea y también de montar una supuesta red con sus contactos en distintos cuerpos policiales para vender datos a terceros.

Por lo que, la incertidumbre sobre su futuro lo tiene bastante nervioso y así se lo hizo saber al funcionario, Eladio.

El Pequeño Nicolás al agente que le investigó : “Me habéis arruinado la vida”