Sobre las 18:00 horas de este pasado jueves, dos ciudadanos se encontraban circulando por la carretera cuando avisaron a la Comandancia de la Guardia Civil que acababan de presenciar a una persona en parapente entrando a Melilla por la zona del Río Nano.
Estos grabaron el momento para ensenárselo a los agentes, los cuales se desplazaron rápidamente al lugar para intentar localizar al migrante, quien consiguió huir a pesar de haber caído en una zona de árboles y haber sufrido un fuerte golpe.
Hasta el momento se desconoce la nacionalidad de la persona que logró burlar dos vallas de seis metros que separan a España de Marruecos, por lo que la investigación continúa abierta.
Se encontró el parapente en una zona cercana a una casa abandonada, pero no hay rastro del inmigrante. Es la primera vez que alguien utiliza un método como este para cruzar el paso fronterizo.