En unos tiempos copados por las acciones para prevenir el coronavirus, Greenpeace y LaLiga se han reunido para hablar uno de los temas más aparcados recientemente, la contaminación. Ambas organizaciones se han juntado para buscar medidas que reduzcan el impacto de los equipos en el medioambiente. La ONG ha decidido intervenir por uno de los aspectos más preocupantes y comunes del fútbol.
Hablamos de los vuelos de corta distancia, una polémica que ha llamado la atención especialmente esta temporada después de varios traslados, principalmente del Real Madrid.
Los de Zidane estuvieron en el foco de las críticas después de sus vuelos a Salamanca y Zaragoza para disputar sus partidos de Copa del Rey. La distancia entre la capital y ambas ciudades es de 176 y 313 kilómetros, respectivamente, y los traslados en avión entre estas ciudades están entre los 15 y 30 minutos.
Greenpeace advierte que los vuelos en avión emiten 20 veces más dióxido de carbono que los transportes en tren, una cifra que aumenta con los vuelos chárter.
Por eso mismo, la ONG ha querido pactar con LaLiga distintas propuestas en un plan informativo de sostenibilidad que la organización lleva desarrollando varios años. Sin embargo, estas iniciativas no se pueden hacer obligatorias para los clubes, por lo que el grupo ecologista ha diseñado una clasifiación donde mide el impacto medioambiental de los desplazamientos de los equipos, para así demostrar la huella que estos dejan en nuestro planeta.
