jueves. 28.03.2024

Las unidades del Ejército de Tierra involucradas en la operación “Misión Baluarte” mantienen activados a los rastreadores que luchan contra la expansión de la COVID-19 por todo el territorio nacional y realizan las correspondientes labores de vigilancia epidemiológica. Su actuación se centra en 15 Comunidades y Ciudades Autónomas y la contribución del Ejército representa la mayor parte del total de los efectivos que aportan las Fuerzas Armadas.

Por eso, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha visitado la Sección de Vigilancia Epidemiológica (SVE) del Mando de Artillería Antiaérea, en el acuartelamiento “Capitán Guiloche” (Madrid), el 30 de octubre.

Un ejemplo de la labor de estas SVE, es la del Regimiento de Artillería de Costa nº 4, que inició las acciones de rastreo, el 26 de octubre, en toda la provincia de Cádiz. La sala desde donde actúa cuenta con 10 puestos de trabajo y el personal que ha sido designado para estos cometidos ha recibido la formación exigida para poder desarrollar sus funciones en coordinación permanente con la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.

También en la Comandancia General de Baleares el Ejército ha contribuido con aproximadamente 90 rastreadores que prestan su apoyo al servicio de salud de la comunidad para localizar a aquellas personas que han mantenido contacto con positivos por COVID-19.

Continúan las desinfecciones en toda España

Las labores de desinfección siguen en diferentes puntos de la geografía desde que se inició esta operación, como en residencias de mayores, instalaciones deportivas, auditorios públicos, estaciones de transporte o centros culturales; entre otros.

La ministra acudió, el 27 de octubre, al centro de mayores “Príncipe de Asturias”, en el distrito de Ciudad Lineal (Madrid), para conocer de primera mano cómo se desarrollan las labores de descontaminación de espacios públicos dentro de la operación “Misión Baluarte”. En concreto, en esta acción, los efectivos involucrados forman parte de la Brigada “Almogávares” VI de Paracaidistas, y su cometido se centra en garantizar la seguridad del centro, en el que se realizan test de antígenos  a los vecinos de la zona.

En Asturias, por su parte, el Ejército ha instalado un puesto avanzado de triaje, frente al Hospital de Cabueñes, en Gijón, para reducir la saturación del servicio de Urgencias. Para ello, se han dispuesto seis tiendas de campaña para apoyar a las instalaciones del centro.

“Misión Baluarte” permite continuar la lucha contra la propagación de la COVID-19, tal y como el Ejército está haciendo desde el inicio de la declaración de la pandemia, con su participación en la operación “Balmis”, en marzo.  Con todas estas actuaciones, y otras más que se realizan a lo largo de toda la geografía, el Ejército de Tierra demuestra su compromiso con la sociedad para tratar de frenar cuanto antes la expansión del coronavirus.

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