viernes. 29.03.2024

El Gobierno no cesó en su lucha para salvar el decreto ley de los remanentes de los ayuntamientos, mediante el cual las corporaciones locales ceden al Estado sus ahorros a cambio de un fondo de 5.000 millones, pero no ha encontrado suficiente apoyo parlamentario. María Jesús Montero, la ministra de Hacienda, ofrecía un fondo de 3.000 millones de euros, al margen del decreto ley, lo que ha servido para que el resto de comunes, con Ada Colau en la cabeza estaban en el no, apoyaran el decreto.

Pero no era suficiente y este decreto ley, acordado por el Gobierno y los representantes socialistas de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), se ha convertido en la primera gran derrota parlamentaria del Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez. No es la primera vez que ocurre esto. Mariano Rajoy tuvo su derrota con el rechazo del decreto ley de estibadores, y en el primer gobierno de Sánchez, el ministro Ábalos vio también cómo se echaba abajo su decreto de vivienda.

En contra

Todos los partidos que apoyaron la investidura de Sánchez, salvo UP votaron en contra del decreto

En esta ocasión, la votación se ha saldado con 156 votos a favor, 193 en contra y 0 abstenciones, tras lo cual en el hemiciclo ha irrumpido un aplauso general ante la ausencia de miembros del Gobierno, ni siquiera la ministra que defendió el plan, María José Montero.

En esta ocasión, el problema no es que el PP, Ciudadanos y Vox se opusieran al decreto, es que sus propios socios legislativos, los que permitieron la investidura de Pedro Sánchez, votaron que no, y echaron abajo el decreto, que sólo obtuvo los votos de los diputados del PSOE y de Unidas Podemos.

Ni el PNV, ni ERC, ni JxCat, ni Bildu, ni el BNG, ni Compromís, ni el Partido Regigonalista de Cantabria, ni Nueva Canaria, ani Coalición Canaria, apoyaron el texto enviado por el Consejo de Ministros, pero tampoco se abstuvieron, votaron en contra, con lo que el Gobierno ya no tenía nada que hacer.

Reproches

Montero acusa al PP de buscar cualquier ocasión para derribar al Gobierno

Todo en un debate bronco en el que el cruce de acusaciones entre la ministra y el Gobierno fueron más que las llamadas al acuerdo tras echar abajo el decreto. Quizá el más duro fue entre la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sola en la bancada del Gobierno durante todo el debate, y el portavoz del PP y vicesecretario de Política Territorial del PP, Antonio González Terol, no por los argumentos, ya que los que planteó el diputado popular son muy similares a los del resto de los partidos: supone confiscar los ahorros de los ayuntamientos, no se ha negociado, es una imposición acordada solo con Abel Caballero, sino por el tono político entre el Gobierno y el principal partido de la oposición.

Montero acusó al PSOE de “perseguir la confrontación, el frentismo, derribar al Gobierno” y de utilizar “cualquier oportunidad para desgastar al Gobierno utilizando a los alcaldes”. Con una respuesta igual de dura por parte de González Terol, que le reprocha ver al PP “como un adversario en vez de como un necesario colaborador”, mientras sólo negocian hasta última hora “para que no se resquebraje el Gobierno”. El PP movilizó hoy a sus principales alcaldes, que acudieron al Congreso y siguieron el debate desde las dependencias del Grupo Popular. Allí estaban los alcaldes de Madrid, Alicante, Zaragoza, Badalona, Badajoz,, Córdoba, Málaga, Marbella, Murcia, Oviedo, Salamanca, Teruel, y los presidentes de las diputaciones de Ourense y Palencia

Dureza

Ana Oramas acusó a la ministra de chantajista, de faltar a la verdad y de soberbia

Pero las críticas vinieron por parte de más partidos. Desde Ciudadanos se le acusó de hacer partidismo y no atender a las necesidades reales. La portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas acusó a María Jesús Montero de “chantajista”, le acusó de “faltar a la verdad” y de ser “soberbia”, además de mentir, por eso le pidió que no manipulara, y el representante de JxCat, Ferran Bel, le instó a “tragarse el orgullo y negociar”.

El portavoz de ERC, Joan Margall criticó al Gobierno por haber renunciado a acabar con el marco de austeridad impuesto por el PP en la crisis de 2008, y atacar a los ayuntamientos incautándose de sus remanentes. Por ello pidió un fondo de emergencia para los ayuntamientos “sin condiciones ni chantajes”, que se exima a los ayuntamientos del cumplimiento de la ley de estabilidad en 2020 y 2021 y que se modifique la ley de estabilidad, cambiando, si es necesario el artículo 135 de la Constitución.

Reconocimiento

Unidas Podemos reconoce que el decreto ley “ha tensado las costuras” del gobierno de coaliciñon

El único que salió en defensa de la ministra de Hacienda, además del PSOE, fue el portavoz de Unidas Podemos.Txema Guijarro, que reconoció que este decreto ley “ha tensado las costuras” del Gobierno, porque “los referentes políticos” de la formación en la Femp no avalaron el decreto ley, pero también defendió que la ministra ha intentado negociar hasta el último minuto, frente a un PP y sus “borbotones de cinismo”. A su juicio “hoy sólo ganan los agoreros".

La falta de apoyo en el Congreso supone la primera gran derrota del Gobierno en la...