martes. 23.04.2024

La autopsia de Esther López sigue sacando cada vez más cosas en claro de como fueron los hechos de su asesinato. En estos momentos, La Guardia Civil está considerando que la joven fuese abandonada viva en la cuneta de la carretera N-122 tras su atropello la misma noche que se reportó su desaparición en la localidad vallisoletana de Traspinedo, el día 12 del pasado mes de enero.

La autopsia ha podido revelar que las heridas recibidas por la fallecida no eran realmente mortales. El atropello se produjo cuando Esther volvía a su pueblo de madrugada, para ser más exactos sobre las 3 y media de la madrugada. Los hechos la sitúan caminando junto al carril derecho de la carretera, lo que supondría que el atropello se produjo desde su espalda. La hipótesis tras la autopsia sería que el vehículo que venía de su espalda la golpease de manera lateral, lo que explicaría sus lesiones en la cadera u el brazo.

Esther apareció gracias a la búsqueda de las autoridades el pasado día 5 de febrero. El cuerpo no tenía la posición típica en la que queda el cuerpo tras un atropello, junto a su mochila y su móvil. Que sus brazos y piernas estén en paralelo pegados a su torso levanta las sospechas de los investigadores del caso, lo que les hace suponer que el cuerpo había sido movido. Esto fundamentaba la hipótesis de que la persona que le atropelló salió del coche para moverla de la carretera y tumbarla sobre la cuneta.

Lo que más sospechoso resultó para finalmente tomar por cierta la teoría fue la posición de sus pertenencias. Con un golpe tan fuerte como un atropello inesperado, el móvil e incluso su mochila deberían de haber salido completamente despedidos alejados del cuerpo, estando más alejados de ella, pero ambos objetos aparecieron justo a su lado, como si alguien los hubiera colocado ahí expresamente.

Todo esto lleva a una posibilidad para que la Guardia Civil finalmente de con el sospechoso y autor del atropello y por tanto, asesinato de Esther López. Rara vez alguien conduce con guantes, por lo que es posible que en las pertenencias de la fallecida haya algún tipo de huellas que desvelen al conductor, ya que estas fueron movidas a la cuneta junto al cuerpo aún con vida pero inconsciente de Esther.

Esther López fue abandonada aún viva en la cuneta tras el atropello