El Gobierno de España ha decidió cancelar los vuelos con Brasil y Sudáfrica, excepto para los ciudadanos españoles o residentes, ante la preocupación de las nuevas variantes mucho más contagiosas detectadas en estos países. La entrada en vigor será a partir de este miércoles y durará, al menos, 14 días.
Tras la reunión de este martes del Consejo de Ministros, la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha explicado que la nueva medida de restricción prohíbe los vuelos a España desde Brasil o Sudáfrica, excepto para los ciudadanos de España o residentes. Otra excepción que contempla esta medida es para los pasajeros que tengan que hacer una escala inferior a 24 horas y que se dirijan a un país fuera del espacio Schengen, siempre que no salgan de la zona de tránsito del aeropuerto.
Esta decisión entrará en vigor a partir del miércoles y será efectiva mínimo durante 14 días que se prorrogarán según evolucione la situación epidemiológica de las nuevas variantes y los casos detectados. "El objetivo es proteger la salud de los españoles para contener la progresión de la enfermedad y proteger nuestro sistema sanitario", ha afirmado Montero en la rueda de prensa. Esta medida es una decisión tomada junto a las recomendaciones de la OMS, la Unión Europea y el Centro Europeo para la Prevención y control de Enfermedades.
La cancelación de vuelos llega después de que la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, adelantara este mismo lunes que el Gobierno estaba estudiando el caso para evitar el contagio de aquellas cepas que viajan más rápido, que se transmiten más rápido y que hacen que esta pandemia crezca de manera exponencial.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid lleva tiempo pidiendo al ejecutivo nacional que tomará este decisión para frenar los vuelos y para que el aeropuerto de Barajas no se convirtiera en una puerta de entrada de las nuevas variantes.
Tras conocerse que la variante británica del Covid-19 esta ya expandida por España, esta nueva medida intenta evitar la propagación de las nuevas cepas detectadas en Brasil y Sudáfrica, más contagiosas que las anteriores.
