jueves. 28.03.2024

Francisco Martínez Arroyo, consejero de Agricultura de Castilla La Mancha, anunció el 3 de agosto una nuevo normativa que supone un antes y un después para los animales, ya que a partir de ahora serán considerados como seres sintientes y no como cosas, como la normativa que estaba vigente desde 1990. 

Martínez Arroyo ha indicado que era urgente modificar el panorama relacionando con este tema y apostar por una ley moderna que convertirá a Castilla la Mancha en un referente para evitar situaciones de maltrato animal y reforzar el respeto hacia los animales. 

El consejo ha comenzado su discurso haciendo referencia a una frase de Temple Grandin, "los animales nos hacen humanos" una frase ha dicho, que “sintetiza la filosofía de esta ley que se debate hoy aquí, en las Cortes de Castilla-La Mancha”.

Uno de los principios de esta nueva ley que da un “paso en defensa de los animales y se pone a la vanguardia en el país en esta materia”, ha indicado, consiste en considerar a los animales como seres sintientes, o sensibles (no son cosas, no son bienes), como establece el artículo 13 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea. Otros de los aspectos, es la protección de todos los animales en general y no solo de los calificados como animales domésticos.

Esta nueva normativa tiene por objeto la protección y defensa de todos los animales, quedando excluidos de su aplicación únicamente los animales que tienen una regulación concreta de su protección y por lo tanto se asegura y garantiza su bienestar, como son los animales de producción, las especies de fauna silvestre, exóticas invasoras y aves de cetrería, por ejemplo.

En concreto, entre las prohibiciones generales destacan el maltrato, abandono, la práctica de mutilaciones con fines exclusivamente estéticos, el sacrificio o matanza de los animales sin reunir las garantías previstas en esta ley, el mantenimiento permanentemente atados o encadenados de los animales, la donación de los animales con fines publicitarios o como premio, la recompensa o regalo por otras adquisiciones de naturaleza distinta a la propia adquisición onerosa de animales, la organización y participación de peleas entre animales y el empleo de especies pertenecientes a la fauna silvestre y salvaje en circos.

Con ella se pretende lograr el sacrificio cero en especial en establecimientos que alojan animales y el establecimiento de la figura de la eutanasia de animales, que será como norma general prescrita y realizada por un veterinario de manera rápida e indolora. Asimismo, se introduce la regulación y control de los sacrificios en los centros de mantenimiento, fomento, cría y venta de animales.

Otra novedad a resaltar es en materia de identificación animal, por conllevar una simplificación y racionalización de la gestión, dado que hasta ahora la legislación autonómica tiene establecido un doble sistema de registro, uno autonómico y otro en cada uno de los municipios, a través del censo municipal donde viva habitualmente el animal.

Castilla La Mancha considerará a partir de ahora a los animales como seres sintientes