viernes. 29.03.2024

La pandemia del coronavirus sigue generando debates en las redes sociales sobre si es verdad o no. Las teorías de la conspiración aumentan y los conspiranoicos, liderados por el cantante Miguel Bosé, siguen dando bulo a todo tipo de teorías.

Por ello, se ha creado un colectivo denominado "Médicos por la verdad", donde se alerta de la peligrosidad .

Uno de los textos que más repercusión está teniendo ha sido el publicado por el médico malagueño Juan Manuel Jiménez Muñoz, compartido en su muro de Facebook.

Juan Manuel Jiménez Muñoz, es natural de Canillas de Aceituno, es médico de familia y ejerce en la capital. Fue el pasado miércoles, cuando decidió publicar una carta en su perfil de Facebook, la carta recibía el nombre de "una carta abierta a los imbéciles", la que apenas en una semana ha tenido una gran repercusión, donde los internautas la han compartido y le han dejado mensajes de apoyo.

Suma ya más de 46.000 me gusta, me encantan, 13.000 comentarios y 59.000 veces ha sido compartida. Esta carta está dirigida a los médicos y biológos que difunden teorías que niegan la pandemia.

En su carta, empieza presentándose y dando sus datos personales, incluso el número de colegiado, por si alguien le quiere denunciar. Este médico de Málaga tiene 60 años y 35 de experiencia y dedica un texto a todos aquellos que parecen renegar del Covid-19.

El doctor empieza su carta recordando a quieren parecer haber olvidado el "método científico, desde Galileo Galilei, nos ha sacado de las sombras. La electricidad, la radio, la televisión, los GPS, los teléfonos, los viajes espaciales, los antibióticos, las vacunas, los telescopios, la anestesia general, el saneamiento de las ciudades, la depuración de las aguas, las radiografías, las resonancias, los rascacielos, los aviones, los trenes, el cine, las fotografías, los ordenadores, y nuestra vida al completo, dependen de una ocurrencia de Galileo", escribía en su muro de Facebook.

Tras esto, decide resumir el método Galileo en tres puntos: "establecer una hipótesis plausible sobre un problema concreto; realizar experimentos para comprobar la veracidad o la falsedad de esa hipótesis; publicar los experimentos para que cualquier otro los pueda reproducir, afirmar o refutar". Por eso ·la sociedad de 2020 es completamente distinta a la de 1700". Al método científico, continua, "le debe la humanidad el contar con herramientas para erradicar una pandemia, o para hacerla soportable: la del coronavirus, por ejemplo".

Para la gente que lo obvian, este les recuerdan que gracias a ella hay enfermedades que son ya parte del recuerdo y que otras han encontrado tratamiento "que las hacen menos mortales". 

Tras explicar esta información de modo introductorio, comienzo a hacer críticas porque según él "después de 300 años de éxitos tenga uno que soportar lo insoportable, resulta estremecedor: la caída del modelo y la sustitución por la farsa, por la charlatanería, por la incultura, por el pensamiento mágico, por la vulgaridad, por el despropósito y por la democracia aplicada a la ciencia, donde el analfabeto opina sobre el coronavirus en igualdad de altavoces que el más docto catedrático de virología, y donde los tratamientos y las medidas de contención de una epidemia son a la carta".

En este grupo mete a los que "parecen añorar la Alta Edad Media" y dice que en él se mezclan "terraplanistas, antivacunas, conspiranoicos, sectas satánicas, neonazis, adoradores de ovnis, hedonistas ácratas, cazadores de masones, fetichistas de los porros, delirantes con el 5G, ecologistas que no han visto jamás una gallina e imbéciles con pedigrí, que pululan en todas las redes sociales instaurando una nueva religión, que, mucho me temo, está calando más de lo que imaginaba en una población carente de cultura y liderazgo".

Lo que más preocupa a este médico malagueño, es que, hay compañeros de profesión "liderando imbéciles acientíficos y abjurando de la ciencia para adquirir una fama pasajera".

"Carta abierta a los imbéciles": el mensaje de un médico malagueño contra las teorías...