jueves. 18.04.2024

Muchos de los influencers, que tanto están de moda en nuestros días, pretenden utilizar su posición social a la hora de subir un contenido y que lo vean miles de personas para consumir gratis en tiendas o restaurantes a cambio de la publicidad que ellos ofrecen. Precisamente, un youtuber tratando de que no le cueste nada lo que consume, alegando, eso sí, que hace promoción de ello, ha sido noticia estos días. Se trata de Borja Escalona, quien ya ha estado en el foco otras veces por situaciones similares. De hecho, en 2021, llegó a estar detenido.

Se trata de un youtuber madrileño que contaba con 36 000 suscriptores en su canal abierto hace 10 meses. Ahora, tiene uno nuevo tras la cancelación por parte de la plataforma de vídeos. "Cogerlo desde cero, petarlo y a funcionar". ¿Qué ha pasado con el antiguo? Al parecer, y según ha explicado él mismo, se lo han cerrado por lo ocurrido tras un incidente del 9 de agosto en Vigo.

"Sí, me habéis tumbado un canal. Me la pela. No os preocupéis, tengo un community que es la hostia y a funcionar. El fandom ya está, el fan base ya está y los haters ya están. Si tengo una horda de haters que van a venir a donde yo estoy...", ha dicho al final de un vídeo en su nuevo canal de ocho minutos.

El youtuber fue a un restaurante de Vigo, ‘A tapa do barril’. Allí, como hace habitualmente, quería comer gratis y no pagar la empanadilla que se había pedido, pero la dependienta se negó y le exigió el pago. Él respondió con una amenaza: "¿Te tengo que pagar? Pues entonces te tengo que cobrar yo esta promoción que acabo de hacer. Te va a salir más caro".

No obstante, la empresa de comidas viguesa, comunicó mediante sus redes sociales un texto en el que defienden a la trabajadora ante los abusos del youtuber. Este alegato le pasó factura al creador de contenido, quien llegó a pedir perdón por lo ocurrido: “He cometido un error muy grande, faltando al respeto tanto a Ana, como a Rebeca, como a toda la franquicia”.

Pero el daño estaba hecho. Con lágrimas, explicaba que había recibido un “vendaval de odio para el que no estaba preparado”, incluso fuera de la Red. Explicaba que salió a un bar con su mujer y el gerente les echó. Además, decía: “Me he tenido que quitar Twitter, no he podido salir de mi casa, no me han dejado ir al gimnasio”.

Borja Escalona, el youtuber que pretende comer gratis a cambio de publicidad