El pasado sábado, 15 de agosto, Murcia se convirtió en escenario de un enlace matrimonial. Hoy, martes 18, sus 200 invitados están sometidos a un seguimiento, por su potencialidad como contagiados de coronavirus. La Consejería murciana de Salud inició las labores de rastreo tras el positivo del novio en una prueba PCR. 

El Servicio de Epidemiología efectuará las pruebas pertinentes, tal y como ha comunicado el departamento regional. El evento, celebrado en la pedanía murciana de Zarandona, se ha convertido en un foco con alta carga viral. 

El positivo del novio se conoció tras practicar una prueba a los trabajadores y usuarios del centro de menores de Alguazas (Murcia). Hasta el momento se tiene constancia de 24 afectados, 17 menores y 7 empleados, entre los que se encuentra el protagonista del enlace. 

Los contactos más estrechos se han visto forzados a la cuarentena, aplicando al centro el protocolo sanitario de las residencias de mayores.  

En el mes de junio la Comunidad aprobó un decreto que regulas las actividades celebradas en la "nueva normalidad", fijando la ocupación máxima en el 75% del aforo que posean los espacios. Medidas como la prohibición de utilizar las pistas de baile para su uso habitual buscan reforzar la seguridad ciudadana. 

Desde Salud se recuerda que las bodas constituyen actos de "elevado riesgo", por ello se insta a la prudencia, subrayando la importancia de extremar las precauciones.