viernes. 19.04.2024

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) para Ecuador emitió una sentencia por un caso de agresión sexual en un colegio a una adolescente hace varias semanas. Este hecho tiene un significado muy importante y ha creado precedente en Latinoamérica.

El caso en cuestión es el de Paola Guzmán Albarracín, una adolescente de tan solo 14 años, que sufrió acoso y agresión sexual por parte del vicerrector del colegio en el que estudiaba en la ciudad portuaria de Guayaquil. El agresor sexual, de 64 años, prometía a Paola ayudarla con los estudios a cambio de mantener relaciones sexuales con él. En el momento en el que empezaron las agresiones, la adolescente tenía 14 años y se mantuvieron en el tiempo durante dos años. 

A los 16 años y fruto de las agresiones sexuales constantes Paola se quedó embarazada y fue entonces cuando el vicerrector intentó convencerla para que abortase. Para ello, tuvo la ayuda del médico del colegio, con quien abortaría la adolescente. El doctor le ofreció practicarla el aborto a cambio también de mantener relaciones sexuales con él. A causa de todas las agresiones sexuales de las que Paola fue víctima, cayó en una depresión y el 12 de septiembre de 2002 decidió quitarse la vida. La adolescente llevó a cabo esta acción ingiriendo fósforo blanco poco antes de coger el autobús para ir a las clases del colegio. En la escuela acudió en estado de emergencia a la enfermería donde no se le ofreció asistencia médica y únicamente le pidieron que rezara por lo que había hecho. Finalmente, la joven falleció. 

La Corte IDH hace responsable a Ecuador de la violencia sexual e institucional que sufrió Paola. Lita Martínez, abogada de Petita Albarracín, madre de Paola, declaró a Efeminista, de la Agencia EFE, que "la Corte explica que el acoso sexual es sistemático, es estructural, que está naturalizado y por lo tanto es muy difícil de detectar, de entender el riesgo y la vulneración a la que las niñas y adolescentes están expuestas”.

Con este caso de Paola del Rosario Guzmán Albarracín nos encontramos ante el primer caso de agresión sexual a una adolescente ocurrida en el sector educativo que la Corte IDH admite, así como sentencia. Han sido muchos años de espera y de lucha; sin embargo, Petita Albarracín ha conseguido su objetivo: hacer justicia y que haya culpables por el acoso, la agresión sexual y muerte de su Paola, aunque su hija ya no pueda volver.

Además, la directora regional para América Latina y el Caribe del Centro de Derechos Reproductivos, Catalina Martínez, declara que esta sentencia que se ha emitido se puede aplicar a todos los Estados que componen el sistema interamericano de regiones. La directora añade: "Es por esto que decide fallar a favor de Paola, porque lamentablemente no es un caso aislado, hay muchas Paolas en Ecuador y en la región que han sido o están siendo víctimas de acoso y abuso sexual en el ámbito escolar”.

Se deben eliminar los estereotipos de género tanto en el ámbito educativo como en el judicial. Catalina Martínez asegura que "estos actos de violencias, como el sufrido por Paola, se normalizan y se toleran porque se nutren de estos estereotipos". En vez de culpabilizar al agresor sexual se culpabiliza a la víctima, como si fuera culpa de ella ser agredida sexualmente, y eso debe cambiar completamente. La directora agrega: "Se forma un imaginario de que no merecen protección". 

Desde la Corte IDH y el Centro de Derechos Reproductivos aseguran que se realizará un monitoreo exhaustivo para comprobar que se cumple en Ecuador la sentencia dictaminada. Además, la gerente del Centro de Derechos Reproductivos, Carmen Martínez, explica a Efeminista que la jurisprudencia de este caso, aparte de para Ecuador, también se aplica para otros países como Argentina, Chile y Colombia, ya que componen la Convención Interamericana de Derechos Humanos y han ratificado la sentencia.

La sentencia de la Corte de Derechos Humanos favorable a una víctima de agresión sexual...