Rusia ya ha empezado la vacunación masiva de su población con su vacuna propia, la Sputnik, convirtiéndose en el primer país del mundo en comenzar dicha vacunación masiva. Con este motivo la viceprimera ministra rusa, Tatiana Golikova, ha señalado que las personas a las que se han vacunado deberán permanecer 42 días sin tomar alcohol ni medicamentos para que estos no provoquen una inhibición en el sistema inmunológico después de administrarse la primera dosis. 

La vacunación rusa ha comenzado en personal médico y grupos de riesgo principalmente. Según informa el presidente ruso, Vladimir Putin, la Sputnik tiene un 95% de efectividad aunque algunas autoridades critican esta vacuna por los pocos datos publicados sobre los ensayos clínicos. 

La vacuna Sputnik V se administra en dos dosis al igual que al de Pfizer. Entre la primera dosis y la segunda deben transcurrir 21 días entre una y otra. La primera dosis se aplica en Moscú, la capital del país y uno de los principales focos de contagios de Rusia.