Wuhan, la ciudad china que se convirtió en diciembre enel epicentro de la pandemia de coronavirus que todavía asola al planeta, ha cambiado drásticamente de situación. Ya durante el mes de agosto pudimos ver unas imágenes impactantes de una piscina llena de gente, sin distancia ni mascarilla, y ha vuelto a ocurrir.
Este fin de semana se están produciendo imágenes que ahora mismo son impensables en cualquier otro lugar del mundo: discotecas llenas de gente, sin mascarilla ni distancia social.
China lleva varios días sin registrar contagios locales de coronavirus. Los casos que se están detectando son todos importados. Por eso, la gente está empezando a perder el miedo. Más aún en Wuhan, donde el último caso local data de mayo.
Varios medios recogen imágenes captadas en clubes nocturnos de esta ciudad, con 11 millones de habitantes, en las que se ve a los jóvenes actuar con normalidad, sin mascarilla, bailando, bebiendo y abrazándose.
Esta misma semana, Wuhan sorprendió al mundo con una fiesta de música electrónica celebrada en una piscina gigante, sin que tampoco hubiera mascarillas o distancia social.