Un pequeño propietario de un restaurante ubicado en en Kelseyville, Lake County, (California) -Lyndall's Sports Stop Grill-, Mike Lyndall, ha decidido aportar su pequeño grano de arena para que los sanitarios puedan sobrellevar la dura situación, tanto física como psicológica, de una forma un tanto más positiva.
La iniciativa de Mike consiste en llevar tres veces por semana el almuerzo a los sanitarios que se encuentran en primera fila combatiendo la pandemia del Covid-19 del hospital Sutter Health Lakeside, que ya incluso han empezado a considerar como una tradición. El principal móvil del propietario es que considera que al realizar este reparto de comida, hace lo correcto, destacando en esta solidaria actitud la influencia de la educación que le impartieron sus padres, Deke y Patti Lyndall.
Mike y sus empleados empiezan a realizar los pedidos de comida a las 5 de la mañana, para que estén listos a la hora de la comida.
Lyndall reconoce que lo que está haciendo le está generando pérdidas, pero él considera que si su negocio sufre una crisis debido a esta causa, no se echará atrás para seguir con su iniciativa solidaria.
Mike sabe que su madre, que falleció antes de que llegase la pandemia a Estados Unidos, le está observando y que estrá muy orgulloso de lo que está haciendo.
El agradecimiento de los sanitarios ante tal actitud es constante, ya que les permite no tener que estar pendientes de tener que ir a otro recinto a comprar comida.
