El estudio desvela algunas de las claves del distinto impactos del virus entre personas, como por qué los mayores de 65 años tienen tasas más altas de mortalidad, qué determina que el virus sea leve y en cambio, en otros casos mortales.
La clave, según el estudio, está en el sistema inmunológico, ya que este necesita actuar de una manera única para combatir el virus. Esto, suele ser algo más improbable entre personas mayores, ya que por ejemplo, las personas infectadas con casos más leves, lanzan un "contraataque" múltiple contra el virus, mientras que el sistema inmunológico de personas mayores de 65 años no lo hace tan bien.
Gracias a este hallazgo, científicos han podido medir las respuestas inmunológicas en la sangre de gente recuperada, actualmente infectada y personas que no han sido expuestas al coronavirus y observaron que los actores inmunológicos clave son los anticuerpos. Estos, son proteínas que se adhieren a un virus y pueden prevenir la infección, y las células T, que matan a las células infectadas y dirigen la escala y estrategia general de una respuesta inmunológica.
Estas células son clave y parte del problema parece ser, ya que los adultos mayores simplemente tienen menos células T. Además, el estudio demuestra también que los resfriados comunes pueden ayudar a la fabricación de estas células.
