Brisa, una joven de 20 años de Mar de Plata, (Argentina), fue atacada por un ladrón que pretendía hurtarle el teléfono. Ante la situación, Brisa aplicó los conocimientos que tenia de artes marciales y se defendió reduciendo al ladrón, junto al que esperó hasta que llegó la policía.
Según contó la protagonista, eran las 19 horas cuando se le acercó, le cogió el teléfono y se fue corriendo hacia una zona céntrica y transitada. "Vi que se iba y me salió salir corriendo y gritar", aseguró.
Rápidamente, la joven lo atrapó, con la ayuda de los presentes, comenzó a golpearle hasta herirle la cara y le hizo una llave con las piernas para inmovilizarlo en el suelo. La gente empezó a apelotonarse a su alrededor y, después, se levantó y lo agarró de la ropa para que no se escapara.
"Todo el día trabajando para que una mierda como tú me robe", le gritó Brisa mientras lo sostenía.
Finalmente, la Policía llegó y se lo llevó detenido.
