Ivie es una niña estadounidense que ha dado una lección en la redes sociales al compartir su madre la carta que le escribió a una compañera suya de clase cuando ésta la llamó gorda.
La madre, orgullosa, cuanta que su hija al principio se mostró cohibida pero que al poco reunió fuerzas y se decidió a explicarle a su compañera lo que opinaba.
La carta dice los siguiente:
"¿Por qué me llamas gorda? No me gusta. Llamar gorda a alguien la intimida”.
"No me merezco que que me traten así (…) Este es mi cuerpo y amo quien soy y nunca lo cambiaré y no me importa lo que otras personas o tú piensen de mí. Sé que mi mamá, mi papá y mi familia me aman”.
"Y no me gusta pesarme constantemente”.
“Soy hermosa y no me importa lo pesado que esté, así que por favor detente. No me gusta".
Watts, la madre, afirma que su hija no buscaba un enfrentamiento con su compañera, sino que simplemente quería hacerla reflexionar.
La bloguera explica que les ha intentado enseñar a sus hijos que deben amarse a si mismos y respetar su cuerpo, el único que tienen, para ser felices. La otra niña, cuenta la madre, “entendió lo que Ivie le decía en la carta y ahora vuelven a ser amigas”.