Bryan Herrington logró salvar cuatro vidas tras morir en fatídico accidente laboral. Jeffrey Granger, quien recibió un riñón y el páncreas, fue uno de los afortunados. Tras la operación, el trasplantado se hizo amigo de la mujer del difunto, Terri Herrington. Tal y como informa CNN, ésta se ofreció voluntaria para donarle su riñón tras conocer las necesidades de Granger.
En 2004, después de sufrir diabetes durante tres décadas, el médico de Jeffrey le informó de la necesidad de un trasplante. Fue Bryan, quien tras precipitarse desde un tejado durante su jornada laboral, quien le donó varios de sus órganos al morir en una caída desde un tejado.
Durante el primer año, Jeffrey no pudo saber quién era el donante que le permitió seguir con su vida. Tampoco la viuda pudo conocer a qué personas había ayudado Bryan. Sin embargo, ambos se intercambiaron mensajes anónimamente durante un tiempo, hasta que Terri decidió enviarle una carta presentándose ella y a su difunto marido.
Según Jeffrey, cuando pudieron hablar por teléfono sintieron que se conocían desde hacía mucho tiempo. Por ello, durante los siguientes 15 años desarrollaron una fuerte amistad.
En 2019, el otro riñón de Jeffrey comenzó a fallar y empezó a recibir diálisis. Cuando se lo contó a Terri, la mujer se ofreció inmediatamente ya que había estado pensando en hacerse donante en vida recientemente y nadie mejor que Jeffrey para recibir su riñón.
Sin embargo, debido a la rapidez de la respuesta de Terri, Jeffrey pensó que se trataba de una broma y publicó en sus redes sociales que necesitaba un riñón, a lo que Terri le contestó: "¿Creías que estaba bromeando?". Ahora el riñón de Terri está justo al lado del de su difunto marido, por lo que Terri afirmó que "estamos juntos de nuevo". El doctor que hizo la operación afirma que el gesto de Terri ha incrementado la calidad y la esperanza de vida de su amigo.
