La obsesión de Elon Musk por comprar Twitter ha desembocado en Tesla pagando los platos rotos, tras la compra de la red social del magnate sudafricano por 44.000 millones de dólares. Tras anunciarse el gran acuerdo el valor de Tesla en la bolsa bajó hasta un 12%, siendo esta la mayor caída de la compañía de California en más de un año.
Y es que no hablamos de perder unos cuantos dólares. La empresa de coches eléctricos ha perdido 126.000 millones de dólares desde el momento que se efectuó e hizo oficial la compra de la red social. Siendo esta pérdida el triple de grande que la inversión realizada por Twitter.
Esta pérdida se debe al desacuerdo de los accionistas de Tesla respecto a la obsesión y decisión de Elon Musk, llegando a hasta a temer que el magnate sudafricano tenga que vender acciones de Tesla para poder llegar a financiar los 21.000 millones de dólares que garantizó personalmente en la operación (el resto de la inversión proviene de préstamos realizados al banco Morgan Stanley y a líneas de crédito respaldadas por Tesla).
A día de hoy, Musk sigue sin revelar de donde sacará el dinero para realizar dicha inversión de 21.000 millones de dólares que tendrá que abonar desde su bolsillo, lo que le hace tener que demostrar su capacidad de liquidez inmediata. Aunque para alguien con un patrimonio y fortuna personal de 260.000 millones de dólares no parece un problema., a pesar de reconocer hace uno días que tiene dudas de que pueda reunir el dinero para comprar Twitter.
Desde el 4 de abril lleva la caída en picado y obsesión de Elon Musk por la red social. No es extraño ver su obsesión, pues desde la fecha indicada, el magnate aumentó su participación en la compañía del pájaro azul hasta el 9,2% y se convirtió en el principal accionista de la red social donde tiene 86 millones de seguidores y utiliza a diario.
La distracción y obsesión del magnate está afectando poco a poco de manera grave a Tesla, pues en las últimas tres semanas ha perdido un valor en bolsa de 250.000 millones de dólares, lo que se traduce en una caída de sus acciones del 23,5% desde el pasado 4 de abril, donde pasó de tener un valor de 1.092 dólares, hasta bajar a unos 876,42 dólares.
