viernes. 08.11.2024

El anuncio del presidente colombiano, Ivan Duque, de reformar la fiscalidad del país fue la llama que encendió la mecha de una región que vive sus momentos más críticos de la pandemia del coronavirus, con una media de 481 fallecimientos diarios durante la última semana (hoy, 687), asolada por el paro (el 15,9% de la población activa está desempleada) y por una situación económica insostenible agravada contundentemente por el impacto de la pandemia que ha empobrecido a miles de familias colombianas. La población ha retornado a las calles por sexto día consecutivo para protestar contra una reforma tributaria -ya retirada- que suponía un grave golpe para la clase media del país sudamericano mediante la ampliación de la base tributaria y el cobro del IVA del 19% a los servicios públicos. 

Ni la retirada del proyecto, ni la dimisión del Ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, han servido para contener a una ciudadanía asfixiada por la política económica de Duque, que desde que ocupara el cargo de Presidente de la República de Colombia en 2018 cuenta sus programas por fracasos. Entre los puntos más controvertidos de la original propuesta de reforma destaca la idea de cobrar impuesto a la renta a personas que ganen un sueldo mensual de más de 663 dólares, en un país donde el salario mínimo es de 234. Los críticos de la reforma argumentan que la solución para paliar la base de recaudación tributaria no pasa por un aumento de los impuestos sobre la clase media del país, fuertemente golpeada por las consecuencias del Covid-19.

Ahora, Colombia se ve envuelta en un mar de violencia en la sexta jornada de protestas. La oficina de la ONU en Colombia deja un balance de 19 muertos -8 civiles y un policía- y 800 heridos. En consecuencia se está produciendo un grave desabastecimiento de los alimentos y combustibles en algunas zonas. La situación más difícil se vive en Cali, al oeste del país, donde la intensidad de las protestas han paralizado por completo la vida de la región. 

"Continuamos (trabajando) con la fuerza pública, con las autoridades locales, para poder garantizar el suministro en el departamento del Valle del Cauca, particularmente en Cali", expresó el ministro de Minas y Energía, Diego Mesa.

Las manifestaciones se suceden en otros puntos del país: Bogotá, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga y Manizales son testigos de los disturbios y los enfrentamientos con las fuerzas policiales. En la capital colombiana, una multitud de personas se congregó frente al condominio donde tiene su residencia privada el presidente Duque para reclamar su dimisión y la de su equipo de Gobierno.

Colombia se ve envuelta en un mar de violencia en la 6ª jornada de protestas contra la...