viernes. 19.04.2024

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha manifestado este jueves que es "absolutamente insuficiente" la distancia mínima de separación, de 150 metros, fijada recientemente por el Gobierno andaluz vía decreto, que debe haber entre salones de juego de nueva apertura respecto de colegios e institutos.

"Ciento cincuenta metros no se parece ni de lejos a los 500 que están poniendo otras comunidades autónomas", ha advertido en esa línea el ministro en una atención a medios en la sede de la Delegación del Gobierno en Andalucía, en Sevilla, antes de mantener un encuentro con la Federación Andaluza de Jugadores de Azar Rehabilitados.

El ministro de Consumo ha puesto de relieve que se está hablando de distancia que debe haber entre locales de juego y "centros educativos" que imparten clases de Bachillerato y Educación Secundaria, donde "las personas jóvenes empiezan a normalizar un tipo de consumo", el del juego, "después de salir del instituto".

El ministro ha comentado que "para una parte importante de jóvenes ya mayores de edad no es problemático" el apostar, pero "hay una parte de esos jóvenes que sí es problemático y puede iniciar una serie de patologías que son muy peligrosas dentro de una normalización del juego como la que hemos vivido en los últimos años, en la que cualquiera que pusiera un partido de fútbol" en televisión "veía la marca de una casa de apuestas" o "podía apostar en cualquier momento, incitado por la publicidad" que le incitaba a "gastarse dinero, a seguir escalando en una dinámica compulsiva".

Garzón ha incidido en que esto afecta a "personas vulnerables, de 18 a 25 años" de edad, que "es el sector que más ha crecido en los últimos años", y ha insistido en que "eso es enormemente peligroso".

Por eso, ha subrayado que "poner 150 metros de distancia" entre colegios y casas de apuesta es "absolutamente insuficiente y, de hecho, otras comunidades autónomas están poniendo una distancia mucho mayor porque entienden que, de hecho, al referirse esto a siguientes instalaciones, es una forma de frenar" la proliferación de nuevos locales de juego.

"No es una forma de solucionar de manera profunda el problema de origen, pero desde luego es una forma de frenar", ha defendido Alberto Garzón, que ha subrayado que "algunos ayuntamientos que han discrepado con la Junta se encuentran ahora en una disputa de naturaleza prácticamente jurídica relacionado con esto".

LA JUNTA ESTÁ SIENDO "MUCHO MÁS LAXA" QUE OTRAS CCAA

En esa línea, ha lamentado que la Junta de Andalucía "está siendo mucho más laxa de lo que están siendo otras comunidades autónomas" en esta cuestión, y desde el Gobierno de España quieren "invitar a las comunidades autónomas a que se tomen más en serio la lucha contra las consecuencias del juego compulsivo de los juegos de azar, particularmente de las apuestas, porque se dan siempre siguiendo criterios de mercado y maximización de beneficios de esas empresas".

El ministro ha sostenido que esto es una cuestión política, en la que hay que aclarar "si vamos a priorizar los beneficios de las casas de apuestas, que son legítimos, por otra parte, porque la actividad de juego es legal, o la salud pública". "Y yo creo que aquí hay que encontrar un equilibrio que siempre priorice la salud pública", ha puntualizado.

Por ello, ha instado a las comunidades autónomas a ser "rigurosas" en
los cambios normativos necesarios para frenar la expansión de los
establecimientos destinados al juego de azar y apuestas, y ha pedido concretamente a la Junta de Andalucía que "permita" a los ayuntamientos modificar sus Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) para establecer distancias entre los centros educativos y las casas de apuestas.

El ministro ha insistido en que, en este momento, varios consistorios andaluces, como el de Málaga o el de Cádiz, se encuentran con un litigio jurídico con la Junta de Andalucía para poder "proteger a sus vecinos".

Por el contrario, el ministro ha expresado su "satisfacción" por la línea de trabajo emprendida por otras comunidades autónomas que están desarrollando normativas que permiten preservar la salud pública y a las familias vulnerables frente al problema del juego compulsivo.

Así las cosas, el ministro ha enmarcado su reunión con la Federación Andaluza de Jugadores de Azar Rehabilitados (Fajer), y también con el presidente de la Asociación Sevillana de Jugadores de Azar Rehabilitados (Asejer) en la preocupación de su departamento "por los fenómenos de ludopatía y de trastornos del juego que se generan como consecuencia de una práctica compulsiva", según ha explicado.

De esta manera, estas reuniones forman parte de los contactos que el ministro mantiene con afectados por los efectos del juego problemático y con las que pretende conocer la realidad de cada territorio ante la expansión de los locales de juegos de azar, especialmente en las grandes ciudades, según han explicado desde el Ministerio en una nota.

DECRETO DE PUBLICIDAD

El titular de Consumo ha aludido igualmente al Real Decreto de publicidad de casas de apuestas y juegos 'on line' que "entrará definitivamente, ya en su última fase, en vigor el 31 de agosto", fecha a partir de la cual, por tanto, "definitivamente no habrá ningún tipo de publicidad de casas de apuestas en eventos deportivos, en la televisión, en la radio, mientras estamos viendo un partido de fútbol" o "cualquier competición deportiva", según ha puesto de relieve.

Además, "los jugadores no podrán llevar en su camiseta la marca de las casas de apuestas respectivas", ha añadido el ministro, que ha lamentado que esta reforma "ha sido recurrida por algunos actores que se sienten afectados, como es la Liga de Fútbol, como son algunos medios de comunicación o incluso las propias casas de apuestas".

"Pero nosotros entendemos que lo que estamos haciendo es preservar la salud pública, los intereses de las familias más vulnerables, que son particularmente aquellas a las que están más dirigidas este tipo de publicidad", ha argumentado el ministro.

Garzón lamenta que la Junta esté siendo "mucho más laxa" que otras CCAA en cuanto a la...