Profesionales de enfermería del centro de salud Carlos Castilla del Pino del Distrito Sanitario Córdoba y Guadalquivir imparten un taller de reanimación cardiopulmonar dirigido a alumnos de Bachillerato del Instituto López Neyra. La actividad tuvo como objetivo principal conseguir que los alumnos adquiriesen los conocimientos y habilidades básicas para actuar ante una parada cardíaca y poner en marcha la denominada cadena de supervivencia en el menor tiempo posible.
La actividad tuvo lugar en la biblioteca del Instituto y fue impartida por Mónica Merlo y Francisco José García, enfermeros de familia del Centro de Salud Carlos Castilla del Pino. En la primera parte se han expuesto las principales técnicas de reanimación cardiopulmonar existentes, conocimientos sobre el manejo del paciente inconsciente, reanimación cardiopulmonar básica (RCP), manejo del desfibrilador automático (DEA) y manejo de la obstrucción de la vía aérea (atragantamiento).
Una vez impartida la parte teórica, se llevó a cabo una segunda fase práctica para lo cual se utilizaron cinco maniquíes de reanimación cardiopulmonar y el desfibrilador automático, sobre los que se aplicaron las técnicas expuestas, se escenificó un atragantamiento y los alumnos pudieron aprender a realizar la maniobra de Heimlich, la RCP y la actuación sobre una persona inconsciente.
Los asistentes a este taller han recibido información sobre cómo reconocer situaciones de emergencia (pérdida de consciencia, desvanecimientos y situaciones de urgencia vital); protocolos de actuación ante estas situaciones; recursos sanitarios disponibles en estas urgencias; técnicas de reanimación cardiopulmonar; actuación en obstrucción de vías respiratorias por atragantamiento y uso correcto del desfibrilador automático. Asimismo, se han realizado prácticas ante estas situaciones, secuencia correcta de actuación con y sin desfibrilador y se han resuelto las dudas de los asistentes.
La cadena de supervivencia
Según los datos del Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias, los cinco minutos posteriores a una parada cardiorrespiratoria resultan cruciales para el paciente, ya que en este tiempo la falta de oxígeno y sangre en el cerebro pueden causar daños irreversibles e incluso la muerte. Por este motivo, es fundamental que, ante un suceso de esta índole, la persona que tiene el primer contacto con el afectado sepa intervenir rápidamente, alertando a los equipos de emergencias sanitarias y aplicando entre tanto las técnicas de soporte vital con las que se inicia la cadena de supervivencia.
Esta cadena consta de cuatro eslabones bien diferenciados y todos a su vez imprescindibles. En primer lugar, hay que alertar con rapidez al servicio de emergencias sanitarias llamando al número 061, para posteriormente comenzar con las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica de forma eficaz y hasta que llegue el equipo sanitario que atenderá al paciente. En tercer lugar, se efectuará la desfibrilación precoz, que se refiere al tratamiento eléctrico de la arritmia que ha producido la parada. Por último, el equipo de emergencias sanitarias realizará la asistencia y traslado al hospital correspondiente
