jueves. 25.04.2024

Uno de los indicadores clave de la marcha de la economía es el Índice de Precios de Consumo (IPC). Pues bien, en las últimas horas los precios de consumo registraron una caída interanual del 0,3 % en junio, debido principalmente a los carburantes y la electricidad, que ya hace un año se abarataron.

Otro factor clave ha sido que aunque algunos servicios siguen a la baja y que el encarecimiento general de los alimentos y el de los productos energéticos han suavizado la bajada.

El Instituto Nacional de Estadística (INE), encargado de determinar este baremo, ha tenido que modificar ligeramente su metodología tradicional debido a la coyuntura excepcional que ha supuesto el coronavirus. Así, ha decidido dividir los productos que determinan este índice en dos grupos especiales.

Uno de ellos contiene los productos más básicos en el hogar (alimentación o bebidas entre otros). Este grupo ha visto incrementar en un 2,3 % su precio en junio frente al mismo mes del año pasado, cinco décimas menos que en mayo. El segundo grupo contiene más bien servicios imprescindibles para las familias, (como lo son servicios de alquiler de vivienda y garaje o la electricidad). Estos han visto como su precio se ha rebajado en junio un 2,4 %, lo que refleja una moderación de más de un punto y medio respecto a mayo.

La metodología empleada por el INE para poder recoger datos ha sido de forma telemática debido a las restricciones de movilidad que impuso el Estado de Alarma.

La bajada de la luz impulsa una caída del 0,3% de los precios