Tras más de un año de la situación de la pandemia, los funcionarios vuelven al trabajo presencial menos un día a la semana.
Se trata de algo temporal, pues fuentes del Ministerio de Hacienda y Función Pública han precisado que esto sólo será temporal, hasta que se apruebe el Real Decreto que recoge el acuerdo que se firmó en abril con los sindicatos para que los empleados públicos de la AGE puedan teletrabajar tres días a la semana de manera telemática y dos en modo presencial.
El CSIF y UGT están en contra de esta resolución de Hacienda al considerar que no reúne los requisitos necesarios para garantizar en las mejores condiciones la vuelta al trabajo presencial, y piden que se aplique cuanto antes el acuerdo firmado con el anterior ministro de Función Pública, Miquel Iceta.
Más bien, el CSIF afirma que pretende establecer un 40% de presencia física y un 60 % de manera telemática, es decir, 3 días a la semana.
Realmente no se sabe hasta qué punto es buena esta decisión, pues el CSIF afirma que "La Administración debería poner en valor la experiencia positiva que ha supuesto el desempeño del trabajo en modo telemático que durante todos estos meses de pandemia ha garantizado el funcionamiento de la Administración y el mantenimiento de prestaciones a los ciudadanos en ámbitos como el Empleo, la Hacienda Pública, la Seguridad Social y tantos otros que suponen la columna vertebral de nuestro Estado".
