El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha sancionado al expresidente de la RFEF, Luis Rubiales, con tres años de inhabilitación, según ha adelantado el portal Iusport. Son dos sanciones de año y medio cada una, por el beso no consentido a Jenni Hermoso y por los gestos obscenos en el palco durante la final del Mundial femenino.
El pleno del TAD ha resuelto inhabilitar a Rubiales por el tiempo sugerido por el juez instructor, Alfonso Ramos, el mismo periodo que hizo la FIFA, tres años, durante los cuales no podrá ejercer cargo alguno relacionado con el deporte.
El exdirectivo trató de contrarrestar la sanción presentando el pasado lunes un recurso, en el que incluía un vídeo donde se le veía dando una charla motivacional a las jugadoras ante de la semifinal del Mundial.
El TAD abrió expediente a Rubiales el pasado 1 de septiembre por la presunta vulneración de dos artículos, que son los que se corresponden a las sanciones impuestas. Un día antes admitió a trámite la denuncia presentada por el Consejo Superior de Deportes (CSD).
El CSD trasladó "una petición razonada" al TAD por una posible vulneración de la Ley del Deporte y del Real Decreto sobre Disciplina Deportiva por parte de Luis Rubiales, en concreto de los artículos 76.1.a de la primera y 14.h del segundo, que hacen referencia, respectivamente, a los abusos de autoridad y a los actos notorios y públicos que atenten a la dignidad o decoro deportivos.
A diferencia del Gobierno, el tribunal no vio abuso de autoridad e inició el expediente por dos faltas graves, no muy graves. No obstante, as sanciones, que podían ir de los dos meses a los dos años, se han estimado en año y medio por la repercusión internacional que tuvieron los hechos y el daño a la imagen del deporte español.