No fue fácil el inicio ya que Inglaterra salió con las ideas claras. Necesitaba los tres puntos para seguir optando a un puesto en las semifinales. Una salida que provocó que llegaran con peligro ante la meta de Cata Coll y que España replegara en defensa y buscara las contras como respiro.

En una de ellas, llegó la galopada por banda derecha de Eva Navarro, con centro al área donde Olga Carmona remató a la red, sin que la guardameta Hannah Hampton pudiera hacer nada por evitarlo.

Un tanto que poco cambio el dibujo del partido. Las de Pedro López lo tenían claro que quien tenía que arriesgar era Inglaterra, por lo que se mantuvieron atrás, a la espera de acontecimientos. Más cuando es un equipo que tiene dos jugadoras como Claudia Pina y Eva Navarro que son capaces por sí solas de destrozar cualquier defensa o generar una ocasión de gol como hizo la delantera del Levante, en el primer tanto.

O también la propia Pina, unos minutos después, aunque en esta segunda oportunidad Carmona no llegó.

Tampoco hubo mucho cambio en el segundo tiempo. Inglaterra fue encerrando en su campo a una España que siguió muy conservadora y que dejó hacer a las inglesas que veían como pasaban los minutos, sin premio, lo que significaba el adiós a la lucha por las medallas.

A pesar del dominio, Cata Coll no tuvo que emplearse muy a fondo, en parte porque España fue durmiendo el partido, ante una Inglaterra que se fue desinflando al no ver opciones para pisar el área española. Y es que el final no tuvo ni emoción, menos tras la expulsión de la inglesa Lauren Hemp.