A la edad de 24 años, Irene tuvo que pasar por el quirófano a causa de una enfermedad rara. Tras continuas visitas e ingresos en el hospital, la montaña era para Irene un santuario.
Sin embargo, a causa de una recaída de la enfermedad, la joven tuvo que volver al quirófano para un trasplante hepático. Sin embargo, para celebrar el éxito de la operación, un mes después de su salida del hospital, la joven escaló la montaña gerundense de Matagalls.
Irene también se ha apuntado al reto de las cien cumbres más emblemáticas de Cataluña y lleva ya la mitad. Siempre con esa actitud, sonriendo y dando gracias porque un donante le ha dado vida.
Además del reto de los 100 cumbres de la FEEC, Irene se ha planteado otro reto: publicar un libro con sus vivencias del proceso de trasplante que le ha cambiado la vida. El título: 'De 0 a 4061 metros. Hospital y Monte'.